BEIJING,— El cubano Andris Laffita lamentó su derrota el sábado en la
final de la categoría mosca del torneo boxeo de los Juegos Olímpicos de
Pekín-2008, reconociendo empero la calidad de su rival, el tailandés
Somjit Jongjohor, quien ganó el oro relegándolo a la plata.
"Es triste porque uno viene buscando lo mejor, una medalla de oro;
estaba entre mis manos y se me fue", declaró el púgil en el Gimnasio de
los Trabajadores luego de la ceremonia de premiación.
Laffita señaló, sin embargo, que le "queda el consuelo de haber
aportado algo para la delegación".
El pegador comentó que Jongjohor es un "contendor difícil" a quien
conoce desde hace varios años, derrotándolo incluso en el Mundial de
Mianyang-2005, en el que el cubano, de 30 años, salió subcampeón.
"Creo que la mayor virtud fue su plan táctico, pues mantuvo la calma
y se llevó la victoria. Es un boxeador experimentado, tiene un
entrenador cubano, precisamente de mi provincia, Pinar del Río", anotó.
Jongjohor, de 33 años y subcampeón en el Mundial de Chicago-2007, se
impuso cómodamente por 8-2, con parciales de 2-0, 4-0, 2-1 y 0-1.