BEIJING.—En uno de los resultados adversos más inesperados del
atletismo y de la delegación cubana, la saltadora de triple Yargelis
Savigne, titular mundial al aire libre y bajo techo, además de segunda
mejor marca del año, se quedó sin medallas, en quinto lugar, este
domingo en la final olímpica de la especialidad.
Yargelis falló en un decisivo primer intento en el que se estiró a
más de 15 metros, al cometer falta sobre la tabla de despegue. Eso la
ponía en desventaja psicológica, pues en el siguiente tendría que
arriesgar menos para marcar y no irse en blanco, con la tensión
adicional de que todas las favoritas rivales comenzaron a presionar,
pues también apostaron al primer intento y querían "matar".
Cuando aseguró en la segunda ronda (14.87), ya cuatro la adelantaban,
tres de ellas sobre 15 metros. Y continuó sin resuello, ni tranquilidad
mental, porque seguidamente le dispararon en línea tres registros de
categoría superior: 15.23 de la griega Devetzi, 15.17 de la rusa
Lebedeva y el impresionante 15.39 de la camerunesa Mbango, récord
olímpico y segunda cifra mundial de todos los tiempos.
Para colmo, la kazaja Olga Rypakova cerró la ronda con el primero de
sus récords asiáticos (14.93) y ya la cubana iba por el sexto escaño,
algo muy duro que afecta a cualquiera que haya entrenado tanto y difícil
de recuperarse de momento, tanto que vino un 14.77 intrascendente en la
tercera vuelta.
Y la rusa Lebedeva, envalentonada como gallo fino, salió en busca de
la camerunesa con un 15.32 demoledor para las de atrás, a continuación
de una falta de la griega que de valer probablemente hubiera sido récord
mundial (más de 15.50). Por cierto, eso desconcentró tanto a Devetzi que
seguidamente cometió tres faltas más.
Tras el breve receso durante el cual quedaron fuera las cuatro
últimas y continuaron en liza las ocho mejores, Yargelis abrió con un
15.05 indicativo de que no estaba liquidada, y que le dio ánimo al
avanzar hasta la cuarta posición.
Pero en el penúltimo la tabla le volvió a malograr otro resultado
sobre los 15.20, lo que acabó por desesperarla, también por el 15.11 de
la kazaja Rypakova, que la relegaba al quinto puesto.
Frustrada la táctica del primer golpe y frenada en un segundo aire
por otra falta, mas la presión de tener que descontar tanto margen,
llegó el 14.91 final en medio de una gran tristeza, la de ella y la de
todos los que saltamos imaginariamente a su lado.
Increíblemente repitió la campeona e idénticas fueron las medallistas
a las de cuatro años atrás.
ANAY PASÓ, INDIRA SE QUEDÓ
Fue una noche en que la apoteosis se produjo primero cuando la rusa
Gulnara Galkina-Samitova pulverizó su propia primacía mundial para los 3
000 con obstáculos, con 8:58.81 (anterior 9:01.59), y segundo cuando
Jamaica se adueñó también de la corona femenina de la velocidad, con la
adición inédita de copar los tres primeros lugares.
Antes, Anay Tejeda confirmó la buena temporada que está rindiendo y
prosiguió rumbo a las semifinales de los 100 metros con vallas, al
llegar segunda en su serie, con 12.82, décimo mejor registro entre las
16 clasificadas.
Pero la cuatrocentista Indira Terrero fue incapaz de acercarse a su
marca de 50.98 en su serie semifinal y eso le reportó la definitiva
ausencia en la carrera decisiva. Su crono de 51.80 fue inferior al de la
víspera, como también su sexto lugar.