BEIJING.— Después del fenomenal récord de 9.69 por parte del jamaicano Usain Bolt en la final nocturna sabatina de los 100 metros planos, el certamen olímpico de atletismo Beijing 2008 prosiguió en la mañana dominical con la sorpresiva victoria en el maratón para damas por parte de la rumana Constantina Tomescu, en medio de condiciones lluviosas y cielo encapotado totalmente opuestas a la de la víspera.

El tiempo de la fondista europea de 2 horas, 26 minutos y 44 segundos estuvo alejado de los mejores registros mundiales y olímpicos del sector femenino para los 42 kilómetros y 195 metros, mas resultó suficiente para conquistar la preciada medalla de oro frente a favoritas como las kenyanas, entre ellas Katherina Ndereba, así como las corredoras locales, consideradas aquí como fuertes aspirantes por su calidad y sobre todo por la estrecha vinculación con las características del recorrido.

Tomescu, de 38 años de edad, se escapó para tomar la punta a la altura del kilómetro 20 y no la perdió hasta llegar a la meta en el fastuoso estadio Nido de Pájaro, para conceder a su país un cetro inédito en esta prueba desde que comenzó a disputarse en la cita de Los Ángeles 1984. Vigésima hace cuatro años en Atenas, su labor más destacada desde entonces había sido el bronce mundial en Helsinki 2005, de modo que no aparecía en ninguna lista de preferidas confeccionadas por los especialistas, ni tampoco entre las diez mejores marcas de la actual temporada.

Ndereba, titular mundial en Osaka 2007 y en París 2003, además de plateada en Helsinki 2005, tuvo que aceptar otro subcampeonato bajo los cinco aros, el mismo obtenido hace cuatro años en Atenas, con 2:27:06, no sin antes defenderse estoicamente de la desesperada arremetida en el último tramo por parte de la china Chunxiu Zhou (2:27:07), su inconforme escolta en Osaka 2007, quien trataba de cambiar su metal bronceado.