BEIJING.—Luego de dos jornadas en que las medallas le han resultados
muy esquivas, la escuadra olímpica cubana de lucha grecorromana tiene la
mira puesta en la del cierre de este jueves, fundamentalmente con la
actuación de su estrella Mijain López.
El pinareño campeón mundial del 2005 y 2007 y subtitular del 2006,
está listo para mejorar su quinto lugar olímpico de Atenas 2004 en la
división máxima de los 120 kg.
La primera salida al colchón del mejor deportista cubano del 2007 y
abanderado de nuestra embajada olímpica, se producirá a las 11:00 a.m. y
desde ese mismo momento tendrá que emplearse a fondo, pues irá frente al
bielorruso Siarhei Artsiukhin, campeón europeo del 2005 y bronce mundial
ese año y el siguiente.
En la fecha intermedia del miércoles, Alain Milián tuvo la poca
fortuna de encontrarse en su primer combate con el que a la postre sería
nuevo campeón olímpico de la división de 66 kilogramos, el francés
Steeve Guenot, ganador de la primera dorada de su país aquí.
Pero fue arrastrado al repechage, donde el monarca panamericano del
presente año y bronce mundial del 2005 consiguió mantener vivas sus
aspiraciones al dominar al húngaro Tamas Loerincz, aunque en la segunda
vuelta fue batido por el bielorruso Mijail Siamionau, quien le cerró el
camino hacia la disputa del bronce.