BEIJING, 12 de agosto— Derrotas de varias estrellas
expresaron hoy el nivel reinante en el comienzo de la lucha grecorromana
de los XXIX Juegos Olímpicos de Beijing, donde los cubanos Roberto
Monzón y Yasnier Hernández mantienen opciones de bronces.
Monzón, subtitular de los 60 kilos en Atenas 2004,
venció 2-0 en su primer duelo al francés Sebastien Hidalgo, pero cayó
después en ambos tiempos ante el ruso Islam-Bek Alviev, quien apoyado en
excelente forma avanzó más tarde a la final y colocó al gladiador de la
Isla en la repesca.
Alviev disputará el oro con el Eusebiu Diaconu, bronce
del orbe y verdugo en semifinales del búlgaro Armen Nazarian, número
tres en la capital griega y vencedor antes del georgiano líder del orbe
David Beninadze.
Otros derrotados ilustres en la jornada matutina fueron
el sudcoreano y líder defensor Ji-Hyun Jung y el uzbeco titular mundial
del 2001 Dilshod Aripov.
Desde las cuatro de la tarde, hora de Beijing, Monzón
buscará derrotar al turco Soner Sucu para vérselas después por bronce
con el kirguizo monarca de Asia Ruslan Tumenbaev.
Todas las peleas son difíciles aquí, había dicho el
cubano poco antes de iniciar la que resulta última competencia tras una
carrera marcada por los éxitos.
Pase lo que pase quiero dedicar tiempo a mi familia,
sentenció el campeón panamericano cerca del escenario competitivo, en la
Universidad Agrícola de la capital china.
La historia de su compatriota Hernández, dorado
continental en 55 kilos, también se ajustó al vaticinio de un primer
revés sin muchos problemas, concretado 2-0 a costa del coreano
democrático Kwang Su Cha, y derrota con el llegado a la final.
Fue este el azerí Rovshan Bayramov, quien le superó 2-1
y rivalizará por la corona con el ruso Nazyr Mankiev, convertido en
verdugo del iraní triple ganador mundial Hamid Soryan.
El egipcio Mostafa Mohamed será su primer contrario en
el repechage, mientras el armenio Roman Amoyan espera por el desenlace.