Inicios poco empedrados tendrán mañana el subcampeón de Atenas
Roberto Monzón y el titular panamericano Yasnier Hernández, quienes
marcarán el debut de Cuba en el torneo de lucha grecorromana de los XXIX
Juegos Olímpicos.
Monzón, de los 60 kilos, se estrenará sobre el colchón de la
Universidad Agrícola de Beijing como favorito ante el francés Sebastien
Hidalgo, y Yasnier, de los 55, exhibirá igual condición frente al
coreano democrático Kwang Su Cha.
El primero está en un sector del organigrama opuesto al asignado en
el sorteo a su victimario en la capital griega, el sudcoreano Ji-Hyun
Jung, a quien acompaña en ese pool el georgiano número uno del orbe
David Bedinazed.
De cumplirse los pronósticos Monzón debe salir airoso, vérselas
después con el ruso Islam-Beka Alvieb o el turco Soner Sucu, oponentes
en el comienzo y, avanzar a semifinales.
Hernández también está contrario a varios de los más connotados
hombres de su peso, incluidos el astro iraní Hamid Soryan, monarca en
los tres Campeonatos Mundiales del ciclo que termina.
Si como se espera sale airoso de su primer duelo, mediría fuerzas con
quien emerja ganador entre el egipcio Mostafa Mohamed y el azerí Rovshan
Bayramov, dueño de una plata universal del 2006 que le convierte en un
escollo más duro.
El certamen del estilo greco se extenderá durante tres jornadas,
tendrá en la intermedia al también cubano Alain Milián (66) y en la
siguiente sus compatriotas Yunior Estrada (84) y Mijaín López (120),
considerado con grandes opciones de coronación