BEIJING.— Si para el experimentado Sergio Álvarez
resultó frustrante el sexto lugar olímpico de los 56 kg, para el
debutante olímpico Lázaro M. Ruiz obtener la misma ubicación, este lunes
en la división de los 62 kg, significó una buena actuación.
Y por supuesto que estaba contento el pesista capitalino
de 23 años de edad, tercer lugar (284 kg) en el campeonato panamericano
del presente 2008 en el Callao, Perú, pues consiguió levantar aquí hasta
294 y por los imponderables propios de las competencias finalizó a 4 kg
del metal bronceado.
En el arranque, pese a que superó en una unidad su marca
de 131, clasificó en octavo puesto, como consecuencia de la corriente
actual de los pesistas nacionales, quienes ya no son tan buenos en el
arranque como en épocas pretéritas.
Tras marcar en el envión con 162, entró en el rejuego
táctico en busca de una mejor ubicación y pareció excedido al solicitar
168 para su segundo intento, pues ni salió del "clean" en ninguna de las
dos tentativas.
La competencia se caracterizó por contar con otro
campeón local, Xianxiang Zhang, con buena distancia de 319 frente a
Diego Salazar (305), convertido en el flamante primer medallista de
Colombia en estos XXIX Juegos Olímpicos.
Sin embargo, las pesas colombianas tuvieron
paralelamente un gran fracaso con Oscar Figueroa, su competidor
principal con atributos de subcampeón mundial del 2006 y cuarto del
2007, además de quinto lugar olímpico en Atenas, quien lamentablemente
se fue en blanco al no poder con la cifra inicial de 128 en arranque.
Y se trata del titular panamericano 2008 en el Callao,
con 304, delante de su compatriota Salazar y el cubano Ruiz. Pero el
deporte es así. Posteriormente en el envión otros cuatro no consiguieron
marcar, entre ellos tres destacados en arranque.