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Rusney Castillo
Virtudes e inspiración sobre la
grama
HAROLD IGLESIAS MANRESA
Quizá por eso la mayoría coincida en
que juega muy suelto, así se le vio durante la etapa
regular y en los play off, donde la presión aumenta,
su efectividad no disminuyó un ápice a pesar de
estar en su cuarta temporada. Ante más de 40 mil
espectadores y el bullicio ensordecedor del
Latinoamericano, donde su novena consiguió dos
importantes triunfos, jugó y brilló como si el
graderío no pesara. Combina tacto, poder, velocidad en
el corrido de las bases, excelente brazo, y lo más
importante, inteligencia, esa que poseen los
grandes, siempre al tanto de la más mínima situación
del choque. También descuella por su versatilidad,
pues antes de patrullar los jardines se desempeñó en
varias posiciones del cuadro (campo corto, segunda y
tercera bases), desde los 11 años, edad a la que se
inició en el municipio de Morón. "Trato de llevar todo a la par, me
exijo mucho en los entrenamientos, es la clave para
mantenerme casi todo el año en forma, pues la pelota
no para", sentenció el primer bate de la armada
nacional y quien cuenta con la aceleración del
swing como principal virtud. Sobre estar en la final destacó: es
muy importante repetir, y ante Industriales, el
equipo insignia de nuestra pelota. Este año actuamos
con más agresividad, experiencia y en muy buen
momento ofensivo, señaló el patrullero derecho que
lleva tres inatrapables (incluido jonrón y doble),
con dos remolques en ocho turnos de esta final
frente a Industriales. Rusney, a pesar de su juventud, es
una de las bujías inspiradoras de los Tigres. Sus
números en lo que va de series play off lo reflejan:
puntero en average con 390 (de 59-23), 18 anotadas,
tres vuelacercas, 12 impulsadas (en cuatro ocasiones
ha fletado el empate o la ventaja), y cuatro robos
en igual número de intentos. Su excelente condición es
continuidad de un calendario regular exitoso. Líder
en dobles (28), tercero en veces al bate (376),
total de bases recorridas (205), almohadillas
robadas (22) y veces que remolcó el empate o la
ventaja (21), quinto en anotadas (80) y cuarto en
jits (125). Además, despachó 16 Mizuno más allá de
las cercas, diez con compañeros en circulación. Apartando esos guarismos, confiesa
que aún le cuesta conectar la bola pegada, en
especial la de Yadier Pedroso y Freddy Asiel
Álvarez: "son buenos y se me hacen incómodos". Licenciado en Cultura Física, tiene
en Michel Enríquez a su ídolo en el béisbol y
agradece mucho la ayuda de Víctor Mesa y Frederich
Cepeda en su carrera deportiva. 25 de mayo de 2012 |
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