Por esa razón, cuesta trabajo ver el nombre de
un slugger entre los campeones de bateo en nuestras Series
Nacionales. En los últimos años esa distinción recayó en seis
ocasiones en el tunero Osmany Urrutia —uno de los mejores en toda la
historia de nuestros clásicos —, pero a quien no se le puede
catalogar de slugger pues su total de jonrones no alcanza para esa
denominación.
Sí hubo un hombre capaz de llevarse cinco
coronas de bateo, sumar más de 400 cuadrangulares y promediar 645 de
slugging, líder absoluto en nuestro béisbol. Su nombre es Omar
Linares, un auténtico fenómeno, irrepetible, poseedor de tacto,
fuerza y velocidad en las bases.
Ahora, en la presente XLIX Serie, un slugger
santiaguero amenaza seriamente con llevarse la corona de bateo:
Alexei Bell. Es el único que promedia por encima de los 400 en este
momento, cuando la temporada avanza hacia su primera mitad. Su
slugging histórico es de 539, ubicado en el lugar 12.
Bell, a pesar de su tremenda fuerza, no es lo
que llaman un “ponchón”. Cuando hace dos años estableció el récord
de 31 cuadrangulares, promedió 355 y, lo más llamativo, solo fue
dominado por la vía de los strikes en 46 ocasiones, con 59 bases por
bolas recibidas, algo inusual cuando de jonroneros se trata.
Ayer, el bien llamado “Cañón del Caney” decidió
el extrainning que le ganó su equipo a Matanzas con su vuelacercas
número 100, el tercer jit que conectaba en el choque en cinco
turnos, para aumentar su promedio a 420, con 42 indiscutibles en 100
veces oficiales. Sin duda, Bell está decidido a convertirse en un
slugger que puede ganar un título de bateo.
GUANTÁNAMO.— El guantanamero
Giorge Díaz Lorens se retira oficialmente esta noche, en el
encuentro que sostendrán los indios del Guaso y los Industriales, en
el Nguyen Van Troi.
Los Juegos Olímpicos de
Barcelona’92 marcaron el momento de mayor brillantez en la vida
deportiva del lanzador. Allí obtuvo dos triunfos, uno de ellos ante
Taipei de China discutiendo la medalla de oro.
El colectivo técnico,
rememora Giorge, evaluó que mi pitcheo (basado en rectas rápidas
laterales y slider) causaba daño a los asiáticos y decidió que
lanzara el choque crucial, a pesar de ser novato en el equipo Cuba.
Como antecedente, junto al
también tirador guantanamero Osvaldo Duvergel, se había echado a
cuestas al equipo Serranos, arrebatándole el título a Industriales
en la final de la Serie Selectiva de 1992.
Después de Barcelona, jamás
llegó a ser el mismo. Razones diversas motivaron su descenso en los
rendimientos hasta que en el 2006 dejó el juego activo. El espigado
monticulista, de 38 años de edad, participó en diez Series
Nacionales, lanzó en 237 juegos, con 70 victorias (17 lechadas) y 83
derrotas. Su promedio de carreras limpias fue de 3,81 y le batearon
para 272 de average.
Giorge Díaz trabajó entre el
2006 y el 2008 en Venezuela como colaborador deportivo y ahora
enseña béisbol a niños de 10 a 14 años de edad en el Combinado
Deportivo Número Uno, en su natal municipio de Manuel Tames, donde
reside. (Jorge Luis Merencio Cautín)