Anglada, dos veces Rey

SIGFREDO BARROS

Rey Vicente Anglada, manager de Industriales, campeón de la 43 Serie. Foto: Ricardo LópezHace 51 años, exactamente el 6 de enero, nació en la muy capitalina barriada de Carraguao un muchacho que, con el tiempo, comenzó a darles quehacer a sus padres, Hilda y Máximo. Era hiperkinético, no se estaba tranquilo un instante y, al parecer, su destino se dibujaba con un par de guantes de boxeo.

Pero un buen día, un amigo de la familia, pelotero él, lo llevó a un terreno de béisbol... y todo cambió. Cambió tanto que, de la noche a la mañana, el díscolo joven se convirtió en una de las mejores segunda base del país. Después... bueno, después vino un compás de espera y la inesperada designación para dirigir a Industriales.

Rey Vicente Anglada tiene un nombre en la pelota cubana. Como jugador primero. Ahora como el sexto director que consigue dos o más títulos consecutivos en 43 años. Pero los humos no se le han subido a la cabeza. Habla con cualquiera si de béisbol se trata. Aunque sea en un estadio abarrotado donde hay que gritar a un interlocutor a dos pasos.

¿Cuál ha sido el triunfo más difícil, este o el del pasado año?

Este, sin lugar a duda. Los equipos estaban en mejores condiciones e Industriales no era el mismo sin Javier.

Te quedaste sin dos de tus principales sluggers a partir del primero de enero. ¿Cuál fue la reacción del equipo?

La mejor. La dirección se reunió con todos y la opinión general fue de que todos somos importantes... pero nadie es imprescindible. Por eso no me preguntes cuál fue la figura decisiva en el equipo. Industriales fue una familia, con sus dimes y sus diretes... como toda gran familia. Desde Scull hasta Otamendi, desde Deinys hasta Espín.

Industriales ha sido, especialmente, pitcheo y defensa. Háblame del trabajo en esas dos áreas.

Nosotros no tenemos dos entrenadores de pitcheo por gusto. Julio Romero y José Elosegui han hecho un trabajo enorme con los lanzadores. Ciudad de La Habana se quedó sin pitchers en un momento (¿recuerdas a De la Torre lanzando tres días seguidos?). Ahora la situación es muy distinta y tenemos, incluso, lanzadores de gran calidad en las categorías inferiores. En la defensa también se ha hecho hincapié, pues sabíamos que nos faltaba fuerza al bate. En el béisbol moderno no se puede ganar sin pitcheo y defensa.

Solo tres directores han ganado tres o más campeonatos seguidos. ¿Aspiras a alcanzarlos?

Respeto muchísimo a Carneado, Higinio y Jova. Impusieron un estilo de juego. Pero no olvides que a los managers los hacen los peloteros. Este Industriales fue un conjunto que vino de menos a más, no era favorito en ninguno de los tres play off. Y los jugadores se sobrepusieron a los contratiempos. Espero que lo vuelvan a hacer el año próximo.

¿Te gusta dirigir?

Bueno, al principio yo no estaba convencido de que lo pudiera hacer bien. Y ahora estoy convencido de que se sufre más como mentor que como pelotero. ¡Las noches que me he pasado sin dormir analizando una derrota! Pero los momentos difíciles se pagan con un triunfo como este. Ver a 50 000 personas saltando de alegría es una sensación imborrable. Pasarán 20, 30 años y no lo podré olvidar.

La premiación se demora. Es prácticamente imposible conseguir que la multitud que inundó el terreno del Latino regrese a las gradas. La 43 Serie Nacional terminó por todo lo alto. Y estoy seguro que dentro de 20, 30 años, los capitalinos seguirán hablando del jonrón de Marquetti... y del tubey de Enriquito.

09-04-2004