Como espacio cultural que se consolida en el mapa de
Iberoamérica, la XVIII Feria Internacional del Libro de Cuba
abre este jueves sus puertas oficialmente con medio centenar
de intelectuales del orbe invitados.
Entre ese grupo de amantes del libro y la lectura, se
encuentran intelectuales de Chile, país invitado de honor.
Esta décimoctava edición en la Fortaleza de San Carlos de
la Cabaña cuenta con más de 260 editoriales representadas, y
se destacan Chile (con 46), España, México y Perú, con la
mayor presencia dentro del habla hispana.
Del programa literario, académico y profesional de la
cita, y en general, sobresalen las más de 300 actividades
previstas, que incluyen no sólo eventos, seminarios y
presentaciones de títulos, sino también conciertos y
muestras fotográficas y de la plástica, hasta el domingo 22.
Además de la delegación de alto nivel de la patria del
poeta Pablo Neruda, honran la fiesta cubana de las letras,
los titulares de Cultura de Ecuador, Honduras, Polonia y
Noruega, que han confirmado su participación.
La avidez de los lectores cubanos y su presencia en
familia recorriendo las empedradas calles de la fortaleza,
sigue constituyendo uno de los atractivos de la Feria del
Libro de la Isla, que continua apostando por la cultura pese
a crisis económica mundial, huracanes y el criminal bloqueo
de EE,UU.
De ahí que junto a la creación literaria en ascenso que
ratifican los escritores cubanos, la disposición industrial
y la voluntad gubernamental posibilitan contar con unos mil
títulos y más de seis millones de ejemplares listos para ser
adquiridos.
Del 26 al ocho de marzo la cita se multiplicará en 16
ciudades del país, y después a todos los municipios que no
estuvieron incluidos en esa etapa, tras lo cual se
desarrollarán las ferias del libro y la lectura en los
macizos montañosos.
El pasado año más de cuatro millones de personas
visitaron la Feria del Libro, que llevaron a sus casas unos
cinco millones de ejemplares.