Portada

 Noticias por día

 Dedicado a

 País invitado

 Programa

 Sedes

 Galerías

Noticias

Un testigo lúcido para los tiempos por venir

Abel Prieto presenta selección epistolar de Alfredo Guevara

PEDRO DE LA HOZ
pedro.hg@granma.cip.cu

Foto: Yordanka AlmaguerCuenta Alfredo Guevara que la muerte hace más de seis años de un entrañable amigo, el doctor Baudilio Castellanos, Bilito, compañero de lucha en los lejanos días universitarios, cuando comenzó a crecer el liderazgo de Fidel, le hizo tomar conciencia de que debía dar testimonio de los avatares y las convicciones de su generación. Fue así como repasó su papelería —artículos, informes, memorandos, cartas, discursos— a fin de publicar lo que entendió podía ser el legado de una "participación que es militancia" en el proceso revolucionario.

La más reciente entrega de esta singular memoria —a fin de cuentas, aunque se aparta del canon del género, no deja de responder a la función de ese tipo de obra literaria que refleja retrospectivamente una trayectoria vital— llegó ayer a los lectores en plena Feria del Libro. A falta de una próxima edición cubana ya en plan, hubo suficientes volúmenes de ¿Y si fuera una huella? (sello Iberautor), como para que la presentación de esta selección del epistolario de Alfredo se convirtiera en un verdadero suceso editorial.

Y no era para menos. Cartas escritas desde 1960 hasta prácticamente hoy documentan medio siglo de experiencia revolucionaria e intelectual. Tal como expresó el miembro del Buró Político del Partido y ministro de Cultura Abel Prieto al comentar el libro, estos textos "resultan imprescindibles para conocer el desarrollo de la política cultural de la Revolución, martiana y fidelista, contraria a la simplificación y el dogmatismo, y la fundación del cine nacional y del nuevo cine latinoamericano", a la vez que constituyen espejo de la "lucidez y la coherencia" del autor. "Con este libro —puntualizó Abel—, Alfredo nos dice que Revolución es lucidez, sí, pero también es amor, libertad, coraje, entrega, fidelidad, eticidad".

Al explicar las razones para hacer públicas estas cartas, Alfredo manifestó: "He querido recorrer los espacios de nuestra vida social y de nuestra formación cultural en estos 50 años, el enriquecimiento de nuestra cultura, a través del entrelazamiento de cultura y política, y del alma de una persona, con una intención: que no solo el acontecer protagonice los textos, que ya estaban escritos, sino seleccionarlos de modo tal que entreguen también la atmósfera, y la atmósfera solo puede partir del testimonio de un protagonista".

SubirSubir