A lo largo de dos horas se recibieron mensajes
provenientes de 47 países, desde Norteamérica a Australia, que
abordaron diversas aristas relacionadas con la inminente conmemoración
del cincuentenario del triunfo de la Revolución cubana.
Como quiera que la realización del foro coincidió con
la difusión del Mensaje del Comandante en Jefe, en el cual anunció su
deseo de no aspirar ni aceptar el cargo de Presidente del Consejo de
Estado que la Asamblea Nacional del Poder Popular elegirá al inaugurar
su nueva legislatura el próximo domingo, una buena parte del
intercambio versó sobre este asunto.
De manera abrumadora, intelectuales y académicos,
activistas sociales y estudiantes, y mucha gente sencilla —un chofer
keniano, un empleado público argentino, una ama de casa chilena, un
oficinista francés, por citar algunos ejemplos— manifestaron su
admiración por la dimensión histórica de la obra y el pensamiento de
Fidel, su confianza en la capacidad de las nuevas generaciones de
cubanos para llevar a buen término el proceso, y su solidaridad con el
pueblo de un país enfrentado a la hostilidad imperial.
Los participantes siguieron con interés las
reflexiones aportadas desde La Habana por el ensayista
ecuatoriano-mexicano Bolívar Echeverría, el escritor gallego Xosé
Neira Vilas, el escritor italo-español Carlo Frabetti, la antropóloga
española Irene Amador, el narrador y poeta ecuatoriano Raúl Pérez
Torres, los analistas políticos españoles Pascual Serrano y Carlos
Fernández Liria, y los intelectuales cubanos Fernando Martínez
Heredia, Rolando Rodríguez, Miguel Barnet y Alpidio Alonso.
Al término del foro, Abel Prieto, miembro del Buró
Político y ministro de Cultura, elogió la lucidez con que estos
intelectuales contribuyeron a circular, mediante un espacio de tan
vasto alcance, ideas necesarias para los cambios que el mundo de hoy
requiere.