El placer doble de Belkys
Ventura
de Jesús y Jorge L. Baños (foto) enviados especiales
Belkys
Castillo no se demoró mucho para pensar la respuesta. "Me siento de
maravilla. En ningún momento pensé en hacer dejación de esta
inigualable experiencia. Tampoco mi esposo ni mi familia pusieron
reparos".
Esta
joven matancera, oriunda del municipio de Los Arabos, siempre anheló
profundamente la posibilidad de asistir a un Festival Mundial de la
Juventud y los Estudiantes. A la hora de la verdad, sin embargo, se
enfrentó a un dilema inesperado: el embarazo.
El premio de haber
resultado delegada era muy alentador, pero debía recibir el permiso
de los médicos y contar con el consentimiento de su familia más
cercana. "Ya tengo cuatro meses y medio de gestación, pero no he
padecido el menor inconveniente y nadie me ha reprochado esta
decisión; todo lo contrario, cuento con el apoyo de todos, incluyendo
a mis compañeros de la delegación".
Belkys es maestra de
primaria y tiene en su hijo de nueve años de edad otro motivo de
felicidad. "Él y mi esposo Rafael Carnet (primer secretario de la UJC
en Los Arabos) me proporcionan ánimo y la seguridad tan necesarias en
este momento. Siento un inmenso descanso cuando pienso en ellos y en
mi pueblo".
Belkys no tiene que hacer
esfuerzo alguno para parecer divertida. Es una muchacha jovial que se
ríe de modo fácil. Admite sentirse muy satisfecha con el resultado
de los debates en los que ha participado y de la profundidad de los
análisis. "Hemos aportado con humildad nuestro granito de arena y,
sobre todo, hemos aprendido mucho. Era una oportunidad que no me
podía perder".
Confiesa que recibe
diariamente considerables muestras de afecto, pero advierte que el
privilegio no resulta nada raro, pues no es la única embarazada en la
delegación cubana. "Somos cuatro, y todas nos encontramos en
excelente forma. Claro, con el tiempo me bastará con el recuerdo de
saber que mi hijo en ciernes fue quizás el más pequeño de la
delegación cubana al XVI Festival Mundial de la Juventud y los
Estudiantes. Para mí es un placer doble".
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