Cuando a Aida Bahr le indagan sobre su Premio Alejo
Carpentier 2006 en cuento (Las Ofelias), reitera: "Ya no lo
esperaba, por eso es doble mi satisfacción". Estaba de vuelta de
varios concursos, y siempre con las manos ausentes. No obstante, sus
gestos rápidos y ligeros confirman el sino de un ser acostumbrado a
persistir y lograr...
Esta
mujer holguinera, aplatanada en Santiago de Cuba, narradora,
guionista, directora de la editorial Oriente, es, precisamente, una
fiel carpenteriana, "un escritor que yo admiro mucho, en lo particular
las obras que más me gustan son sus novelas cortas El reino de este
mundo, El arpa y la sombra y dentro de sus cuentos,
Semejante a la noche y Los advertidos, me apasionan".
"Lo otro es una responsabilidad, en cierta forma un
desafío —dice con su hablar precipitado—. Tengo muy claro que ganar un
premio no lo convierte a uno en un consagrado aunque en la práctica a
veces parezca así. En realidad es una cuestión puramente formal, la
calidad de la literatura no depende de esto, aunque sí te coloca en la
mirilla, la gente espera de ti más; de manera que es un compromiso muy
serio."
"¿Escribir, ser mujer y dirigir una editorial? Cosas
bastante complicadas... "
"Yo tuve mucha suerte en la vida porque me casé con un
escritor que me apoyó mucho en mi carrera literaria. Dirigir una
editorial cuando una es escritora y en las condiciones en que he
tenido que hacerlo no es una tarea fácil, roba mucho tiempo y mucha
energía mental, pero no me arrepiento."
La editorial Oriente —a cuya dirección se incorporó en
1998—, del Instituto Cubano del Libro (ICL) cumplió 35 años en el
2006. Desde esa fecha hasta el presente posee un catálogo de más de 1
100 libros publicados y en la actualidad de sus máquinas impresoras
salen anualmente 40 títulos.
Aida no puede disimular su gozo al comentar sobre las
colecciones. Mariposa, entre "las nuevas" le resulta bastante
especial: "Está abierta, incluso, a autores extranjeros porque se
trata de obras publicadas por mujeres o escritas sobre ellas
independientemente de que quien las cree sea un hombre. No es
feminista, es femenina, no se dedica a los estudios de género, sino a
la promoción literaria dedicada a la mujer. Nos ha dado muchas
alegrías".
Un paréntesis: "La editora se creó para atender los
intereses de los autores del oriente cubano, pero no solo trabajamos
con carácter de territorialidad, sino de calidad. Una obra de un
escritor del occidente si puede ser más exitosa que otras propuestas,
se favorece; si están parejas se da prioridad a los creadores de la
región oriental".
Este sello también dispone de la colección Bronce,
dedicada a las Ciencias Sociales (surge en el 2005), otra de
literatura para niños, la de Autoayuda, "generalmente libros pequeños
dedicados a cuestiones de medicina, con un lenguaje asequible para que
lleguen a la población, por ejemplo, cómo evitar las crisis asmáticas,
temas referidos a la diabetes, el glaucoma, el tabaquismo y la
relativa a temas culturales: música, cine, artes plásticas... ".
Y Oriente ya está en Ciudad de La Habana, en el
complejo Morro-Cabaña, para asistir a los inicios de la XVI Feria
Internacional del Libro Cuba 2007. Un total de 15 títulos estarán en
presentación y venta. Ofrece dos ensayos: Para qué sirven los
jarrones del Palacio de Invierno, de Jorge Fornet y
Cesante temporalidad de la poesía, de Ivet Fuentes de la Paz,
quien se adentra en la figura de Lezama Lima.
Valoración crítica de José Soler Puig, otro de los
títulos, un homenaje al aniversario 90 de su natalicio (10 de
noviembre de 1916, muere en Santiago de Cuba su ciudad natal, el 30 de
agosto de 1996), un recorrido por la trayectoria de este escritor
desde sus primeras obras hasta las concebidas al final de su vida. De
Oriente son además, La guerra de liberación nacional, de
Roberto Pérez Rivero, que profundiza en el surgimiento del Ejército
Rebelde; Cuba, ejército y reformismo, de Servando Valdés (el
ejército constitucional al suceder la reforma tras la Revolución del
30); el segundo tomo del Primer Partido Comunista, de Angelina
R. Blaquier; la biografía de Pepito Tey, y Esclavitud, familia y
parroquia, una investigación sobre las familias esclavas.
Quienes concurran a la cita habanera dispondrán,
igualmente, de Todo sobre Oscar, de Juan Antonio García
(detalles del publicitado premio cinematográfico); Querer escribir,
poder escribir, del argentino Javier Chiabrando (las técnicas para
aprender el oficio de escritor); Las edades transparentes,
novela de Lourdes González; La ciudad de los muertos, libro de
cuentos de Gina Picard, y Lo que vi en Cuba, las memorias de
Eva Canel, escritora española integrista pero amiga de Martí; Los
ángeles no son sino demonios, de Doribal Enríquez y El
palomonte, la brujería en Cuba, de Joel James.