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24/10/2002
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Agroindustria azucarera

La reestructuración es el camino adecuado

JUAN VARELA PÉREZ

La inauguración de los Cursos de Superación para los Trabajadores Azucareros vincula a este sector económico con más fuerza al programa por el desarrollo de la cultura general e integral del pueblo.

Foto: ISMAEL FRANCISCOEl Boris Luis Santa Coloma, de La
Habana, es un ejemplo de avance en 
la eficiencia industrial.

Ulises Rosales del Toro, ministro del Azúcar, llegó a esa conclusión al referirse a los 84 271 inscritos en los diferentes niveles (de ellos 33 170 optan por el estudio como empleo), cifra esta que pudiera incrementarse dada la disposición que se observa, incluso en los ingenios que no se desactivan.

Al hablar en el batey del central Eduardo García Lavandero, en Artemisa, el Ministro hizo un análisis del esfuerzo desplegado por los agroindustriales en los últimos años para elevar la producción y la eficiencia y disminuir los costos.

De esta forma se laboró para darle respuesta a la Resolución Económica del V Congreso del Partido e implementar las 19 medidas adoptadas por los obreros en 1996 durante el Parlamento Cañero.

Entonces, apuntó el titular del MINAZ, se fijaron metas de trascendencia para estos años, lo cual evidenciaba la preocupación de la dirección del país por preservar la agroindustria azucarera cubana.

Enumeró, entre esos incipientes logros, el restablecimiento de la organización de la producción cañera y con ella la composición de cepas, el programa de variedades, el cultivo y otras atenciones, a todo lo cual se le dedica más del 60% del presupuesto total anual del organismo.

Señaló que ese extraordinario esfuerzo hizo posible incrementar en ocho las toneladas de caña por hectárea, a la vez que se recuperaba, para la cosecha mecanizada, el 70% de participación en la zafra.

La innovación tecnológica que abrió las puertas a la compactación del proceso industrial en más de un 50% y la disminución en un 5% del tiempo perdido en el ingenio, son parte de los avances registrados en esa etapa.

El Ministro mencionó, con particular énfasis, la reducción en el gasto de divisas por cada tonelada de azúcar crudo y la integración al proceso de redimensionamiento de 483 unidades productivas y de servicios, mientras más de 30 entidades daban pasos en la búsqueda del perfeccionamiento empresarial.

La generación eléctrica con el empleo de la biomasa en los centrales se elevó de 18 a 29 kW por tonelada de caña molida, y el MINAZ, junto al Ministerio de la Industria Básica, emprendieron la transformación del sistema eléctrico en 71 bateyes que benefició a miles de familias.

Repercusión económica y social tuvo la decisión —muy necesaria— de paralizar de 40 a 50 centrales por año dado su grado de ineficiencia.

Estos elementos demostraban que ya se alcanzaban progresivos, aunque modestos, logros en lo productivo y económico, mientras se ganaba terreno en la diversificación y en el empleo de los recursos técnicos y materiales.

Sin embargo, reconoció Rosales del Toro, estos niveles no bastaron como para despegar con intensidad las fuerzas productivas, bajar aún más los costos y lograr la rentabilidad en la mayoría de las empresas para enfrentar el deterioro que se reitera en el llamado mercado mundial por los bajos y ruinosos precios del azúcar. Esto obligó a la dirección del país, precisó, a tomar decisiones extraordinarias.

Es entonces, subrayó, cuando el 10 de abril pasado, el Comandante en Jefe Fidel Castro orientó la reestructuración del Ministerio del Azúcar como el camino adecuado para enfrentar la crisis, salir fortalecidos y alcanzar objetivos superiores en el sector agroindustrial.

Han transcurrido seis meses desde el planteamiento y podemos afirmar "que hemos desarrollado un intenso trabajo de orientación, cohesión de todas las fuerzas e implementación de las directivas para cumplir con mayor eficiencia las nuevas misiones planteadas".

Así se convocó a un proceso de reuniones para debatir el documento programático que explica los fundamentos para llevar adelante la transformación, la seguridad de empleo, estudio y protección salarial. A la primera etapa en la cual se realizaron 2 700 asambleas con casi 290 000 trabajadores y de las que resultaron 39 530 planteamientos, siguieron otras. En este momento se ejecuta una quinta etapa, esta vez con los colectivos de las empresas y unidades productivas del sistema de apoyo al MINAZ.

En fecha tan temprana como 1960, cuando el gobierno de Estados Unidos privó a Cuba de la preferencial cuota azucarera, el compañero Fidel expresó que: "...Si fuera posible empezar a organizar de nuevo toda la producción azucarera, lo que haríamos en primer lugar es buscar las mejores tierras para esos cultivos, planear un tipo de agricultura diversificada y calcular cuántos centrales harían falta para producir una cantidad de azúcar determinada".

Aquella estrategia se postergó solo debido al beneficioso comercio existente durante décadas con la URSS y otros países socialistas. En las condiciones actuales, enfatizó el Ministro del Azúcar, esas ideas vuelven a tener total vigencia para que el sector no constituya un freno al desarrollo del país y llevar a vías de hecho las concepciones del Comandante en Jefe sobre el nuevo MINAZ que se ha proyectado.

Esto, indicó, exige más eficiencia, profesionalidad, competitividad, diversificación agrícola e industrial apoyados en los conocimientos de nuestro gran capital humano y en busca de una agricultura sostenible.

24/10/2002

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