La lucha se hace una radiografía

Rafael Pérez Valdés

La familia de la lucha cubana sigue recibiendo felicitaciones por los resultados obtenidos en los dos campeonatos mundiales efectuados en las últimas semanas. Y en medio de esta gratificante situación, ayer se reunió para hacerse una radiografía...

En la libre, como se recuerda, se dio en Teherán un salto desde el séptimo lugar hasta el tercero, con una medalla de oro y dos de plata, lo cual hay que interpretarlo como un premio a la tenacidad y al deseo de subir escalones.

En esa cita se alcanzaron una medalla de oro (René Montero, en la división de los 55 kg) y dos de plata (Yoel Romero, 84, y Alexis Rodríguez, 120).

Los de la grecorromana, más acostumbrados a la miel del éxito, finalizaron terceros en la lid del orbe, celebrada en Moscú, con dos preseas de bronce aportadas por Filiberto Azcuy (74), doble monarca olímpico, y Alexis Rodríguez (120).

Ambas actuaciones dispararon a Cuba a un segundo lugar general por países, lo cual despierta el interés, como se ha ratificado, de tratar de ir en busca del puesto más elevado, algo lógico aunque se reconozca la jerarquía de Rusia.

Hay incluso grandes aspiraciones, que no son ocultas, para los Juegos Olímpicos de Atenas'04: se piensa en cuatro medallas de oro, y mientras se espera por su posible materialización demuestra la fortaleza con que se considera esta familia.

Las actuaciones en ambos mundiales han permitido que estos muchachos lleguen a un punto más empinado en la confianza sobre sus posibilidades, lo que va a ser acompañado, según escuchamos, de mayores oportunidades de roce internacional.

Se ha logrado rescatar la práctica de este deporte en 32 municipios del país, de los cuales es de esperar surjan también los relevos que lleguen a la cima de la pirámide.

Esta radiografía de la lucha cubana incluyó también, claro está, aspectos que requieren un perfeccionamiento, como el análisis de las divisiones en las que no se lograron los resultados esperados.

Otro de ellos es la necesidad de reforzar la disciplina, de prevenir o atajar a tiempo posibles actitudes negativas.

También se habló, dado el prestigio creciente alcanzado por nuestros luchadores, de un posible Campeonato Mundial en Cuba. Se ha realizado ya una solicitud para el del 2006. Y si se concreta, no lo dude, algunas medallas no cruzarán el aeropuerto internacional José Martí, pues quedarán en casa.