Una emotiva carta de Gerardo Hernández Nordelo, uno de los cinco héroes cubanos prisioneros políticos del Imperio, recibió aquí Juan Miguel González, en respuesta a una misiva que éste le enviara a la cárcel donde se encuentra arbitrariamente apresado.

Gerardo se excusa por el tiempo que tardó en responderle y lo atribuye a la gran cantidad de correspondencia que recibe, sobre lo cual expresa jocosamente: "¡Esto es un fenómeno!. Si le quito los sobres a todas las cartas que me llegan y los mando para materias primas, salgo cederista destacado".

A continuación agrega: "Tú no puedes imaginarte, por mucho que te lo hayan dicho, lo que significó para nosotros cinco el haber vivido, en el mismo corazón de Miami, todo el proceso del niño, la visita de Raquel y Mariela primero, y la de ustedes después, con el feliz regreso a la Patria".

Ese derroche de honor, de valentía y dignidad que hizo la familia, encabezada por ti, agrega el texto, fue para nosotros un estímulo inmenso que multiplicó el orgullo que sentimos por ser cubanos y nos dio una fortaleza increíble para continuar adelante.

"Por eso, hermano, tengo que comenzar estas líneas aprovechando la oportunidad para hacer algo que quisieran hacer todos los buenos cubanos: A ti, y a toda la familia, gracias", precisa.

Después Gerardo se refiere a la esposa y los hijos de Juan Miguel, pregunta si Elián siguió practicando kárate, y menciona un dibujo que adjunta para los niños de la escuela Marcelo Salado, "que espero les guste".

Al final de la carta, explica que los cinco están bien, con más fuerza y disposición que nunca para continuar con esta lucha de todos por la razón y la justicia.