¿Por qué votamos?

Por el más capaz

Vamos a elegir al que nos va a representar en nuestro barrio, en el lugar donde vivimos, quien nos ayudará a buscar la solución más adecuada a nuestras dificultades. El delegado puede canalizar nuestras opiniones y necesidades. Sabemos que hay cosas que tienen prioridad, pero poco a poco todo se va remediando, como ha demostrado la Revolución. Y el domingo voy a votar por el mejor, por el que sea capaz de representarnos dignamente.(Javier Crespo, liniero de la Empresa Eléctrica de Ciudad de La Habana).

Un derecho como cubano

El día 20 voy a votar por el candidato con mejores condiciones humanas y revolucionarias, el de mayor prestigio, pues él será la voz de la comunidad. Como siempre, iré temprano a depositar mi voto en las urnas, con libertad, sin ninguna presión. Es un derecho que me otorga la Constitución, a mí y a los millones de cubanos que el próximo domingo elegiremos a los delegados a las Asambleas Municipales del Poder Popular.(Nercy Martínez Cuenca, especialista en Medios de Comunicación del ICRT)

Todos son de los buenos

¡Claro que voy a votar! Dentro de unos días cumplo 89 años de edad, pero tengo fuerzas para hacerlo. Los postulados son gente del barrio y conocen lo que pasa y las vías y formas para encontrar las mejores soluciones. Los que están en los murales son gente buena y trabajadora, y la verdad, puedo elegir a cualquiera de ellos, pero hay que escoger a uno y lo haré. (Rafaela Jiménez Alomá, ama de casa, municipio de Plaza de la Revolución)

Deber de cubano y patriota

Ante todo votamos porque así lo establece la Constitución de la República, es un derecho y un deber de los ciudadanos cubanos, y lo haremos para elegir entre los mejores a aquel de mayor prestigio e integridad, alguien con suficientes méritos y condiciones personales para trabajar en favor de la comunidad porque tiene la ventaja de vivir en ella y conocerla bien. (Jorge Luis Fernández Leyva, comercial de Correo Universidad)

Ya no es un negocio

Para elegir como delegado del Poder Popular al que mejores condiciones tenga, una gente capaz y diligente, abnegada, que se preocupe por las necesidades de su circunscripción e interprete el sentir de sus electores. En fin, alguien que responda a las opiniones de nosotros, que somos el pueblo. A diferencia de lo que sucede en muchos otros países, aquí las elecciones no son un negocio. (Jorge de León Enríquez, profesor de Computación, Facultad de Lenguas de la Universidad de La Habana)

Preservar esta obra

En Rancho Alegre, más allá de El Culebro, corazón mismo del grupo montañoso Sagua-Baracoa, a unos 40 kilómetros al Suroeste de esta población, en Holguín, Odanis Rodríguez Monje, el joven maestro innovador, acudirá a las urnas "para defender con mi voto por el mejor, la obra de la Revolución y ese increíble proyecto de justicia social que ha permitido, por ejemplo, que mis tres alumnos reciban los beneficios de los programas audiovisuales y la computación, en igualdad de condiciones como cualquier estudiante de pueblo o ciudad. Solo por esta razón, entre miles que pudiera señalar, estaré temprano en mi colegio electoral".

Se acabó la fanfarria

Ayer lo vi. Estaba como de costumbre: recogido en la humilde tranquilidad de su hogar, repasando como si fuesen páginas de un libro (el de su vida) los más de 60 años dedicados a la actividad tipográfica. "Claro que tuve que imprimir pasquines, boletas, fotos, anuncios y toda la fanfarria aquella que se armaba antes del año 1959 cuando había elecciones... hasta que un día me cansé de tanta mentira y dije: ¡No voto más! Pero vino Fidel y todo cambió. Desde entonces no he dejado de ir a las urnas. Este domingo votaré otra vez junto a mi esposa." (Abel Fernández Estrada, 89 años, gloria de la tipografía en Las Tunas)

Democracia verdadera

Las elecciones cubanas no pueden ser más democráticas. En realidad aquí gobierna el pueblo, que nomina, elige y si es necesario, revoca. Más que razones tenemos para estar este domingo 20 en los colegios electorales y bien temprano. Elegiremos a nuestros delegados de circunscripciones, cantera directa de las Asambleas Municipales. Parte de ellos engrosarán las Asambleas Provinciales y el Parlamento, máximo órgano de poder en el país, integrado por hombres y mujeres de los más diversos sectores de la sociedad, obligados periódicamente a rendir cuenta ante sus electores.(Profesor, doctor Sergio Vega Basulto, destacado científico camagüeyano e investigador de las enfermedades cerebrovasculares)

Para que el pueblo siga gobernando

NUEVA GERONA.— La alegría de las 700 familias que en la Isla de la Juventud tienen reparadas sus casas dañadas parcialmente, se multiplica y se suma al pueblo que entre ruinas levanta su conciencia.

Entre los primeros en votar el
domingo estaremos los damnificados, enfatiza Amarilys.

Para Dora Blanco Rodríguez, empleada en la industria ceramista y presidenta del colegio electoral de la circunscripción 7, en la finca Reina Amalia, en las afueras de Nueva Gerona, por encima de su casa sin techo está la preocupación por preparar bien los comicios para elegir a los delegados de base. "Seguiré dando lo mejor —explica— ya que estas elecciones garantizan la continuidad de nuestro Gobierno popular, una obra que los cubanos debemos proteger y defender, y ahora puedo consagrarme más a la tarea al tener mi casa reconstruida".

"Yo estaré entre las primeras en votar en mi barrio", asegura Amarilys Pino Rojas, una de las damnificadas del caserío Los Clementes, cuyos vecinos enseguida recogieron las casas en ruinas, rescataron los materiales recuperables, repararon lo que estaba en sus manos, como el juego de muebles de la propia Amarilys, y empezaron a poner tejas en los desmantelados techos.

"No solo somos beneficiados en muchos aspectos, sino también protagonistas de nuestra obra colectiva, que ahora tendremos la oportunidad de apoyar una vez más en las urnas eligiendo a los mejores", subraya.

En Los Bejeranos, Álida Amador García, al otro día de ser nominada candidata a delegada a la Asamblea Municipal del Poder Popular, el ciclón Lili le llevó el techo de la casa que la Revolución le había construido tras el paso del Michelle, y lejos de amilanarse sacó fuerzas para dar ánimo a los demás y seguir apoyando los preparativos de las elecciones del 20 de octubre, porque, según afirma, "en el voto que ejerceremos va toda nuestra confianza en nuestro Gobierno y nuestro Socialismo, que jamás nos dejan solos".

Las elecciones garantizan
la continuidad de nuestro
 Gobierno popular, subraya
Dora, ya con la satisfacción del
 techo de su casa restaurado.

En el caserío que ya los vecinos llaman por su futuro nombre: Felicidad, pues gran parte de sus casas requiere hacerse nuevas en este mismo lugar aledaño a la fábrica de caolín, en la circunscripción 49 del Poder Popular, Modesto Mendoza La Rosa transpira alegría ante la proximidad de las elecciones "y mucho más —confiesa— por la rápida llegada de ayuda material, brazos y solidaridad para tanta gente necesitada: por eso participamos activamente en la recuperación."

"Con mis 75 años entregaré mi aporte para levantar mi casa y la de los vecinos, junto a nuestro delegado del Poder Popular, quien en los momentos más difíciles siempre ha estado al lado de nosotros".

Los damnificados serán los primeros en los colegios electorales, sobran motivaciones y sentimientos.