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Más de mil policías
buscan a francotirador WASHINGTON, 17 de octubre.— Más de mil policías continuaban la búsqueda del misterioso francotirador que desde hace dos semanas mantiene atemorizada a la ciudad de Washington y sus alrededores.
Dado que el desconocido, si es que fuera solo un individuo, dejó pasar ya dos días sin actuar desde su noveno crimen, ocurrido el lunes, crece la preocupación respecto a la posibilidad de que pueda atacar nuevamente. A pesar de que, tras el asesinato de una mujer el lunes, varios testigos oculares declararon haber visto al agresor, la policía no logró hacer un retrato robot del individuo dada la disparidad de los testimonios. Unas 70 000 llamadas telefónicas ingresadas en las primeras 24 horas después del asesinato de la empleada del Buró Federal de Investigaciones (FBI), de 47 años de edad, tampoco aportaron datos importantes. En el lugar de los hechos, un aparcamiento, la policía no encontró rastros de la munición y las grabaciones en video del lugar no ofrecieron hasta ahora ninguna pista. La policía espera avanzar en el caso con apoyo militar. El Pentágono puso a disposición de los investigadores varios aviones de reconocimiento, que pueden contribuir a detener al atacante tras un temido nuevo golpe. Estos aviones cuentan con una tecnología más avanzada que los helicópteros de la policía. En consideración a que desde 1878 está prohibido que los militares intervengan en acciones policiales, las aeronaves serán pilotadas por miembros de la Fuerza Aérea, pero el trabajo de investigación será realizado por agentes del FBI. El misterioso francotirador mató hasta ahora a nueve personas e hirió de gravedad a otras dos. A pesar de la serie de asesinatos, el presidente estadounidense, George W. Bush, rechazó reformular las leyes sobre posesión de armas y las solicitudes para que se registre la huella balística de todas las armas vendidas en Estados Unidos. Bush recibió, durante su campaña electoral, el apoyo de la Asociación Nacional del Rifle. |
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