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La Capital chilena alberga a unos La población de estos roedores en Santiago, donde residen 5,5 millones de habitantes, aumentó de forma sostenida en los últimos años, principalmente por el fracaso en las políticas de salud pública SANTIAGO DE CHILE, 3 de agosto (PL). — Alrededor de 75 millones de ratones viven en esta capital, según una investigación que abarcó a 10 comunas de la Región Metropolitana y fue difundida hoy por el portal electrónico Terra. El estudio, encabezado por el médico veterinario Pedro Cattan, de la Universidad de Chile, se basa en que existen entre 60 y 70 roedores por hectárea y de cada 10 sitios analizados, entre seis y ocho tienen su presencia. Según Cattan, la población de ratones en Santiago, donde residen 5,5 millones de habitantes, aumentó de forma sostenida en los últimos años, principalmente por el fracaso en las políticas de salud pública. Declaró a Terra que en la capital hay principalmente tres especies de roedores, siendo "la laucha la más importante, porque ensucia y se orina encima de los alimentos". Las otras son los guarenes, asociados a las acequias y canales, y la rata negra, que habita en los tejados. En la parte alta de la ciudad preocupa la presencia de ratones silvestres asociados con los sectores precordilleranos. Para el especialista, "Santiago es una ciudad muy grande y en la medida que crece, aumenta el consumo, la basura, hay más desperdicios, más contaminación de las aguas y de terrenos. Todo esto se traduce en más ratones". Llamó a la ciudadanía a usar plaguicidas para mantener a los roedores fuera del hogar. De esta forma, se pueden evitar enfermedades transmitidas por los ratones, como el cólera, el virus hanta, diarreas, entre otras. Pidió a todos los organismos afectados —como empresas, municipios o gobiernos regionales— a buscar los recursos necesarios para enfrentar este problema. De acuerdo con el médico veterinario, en la próxima primavera (septiembre a diciembre) ocurrirá una nueva explosión demográfica de ratones, pues este año ha sido lluvioso, lo cual permitirá un mayor florecimiento de las semillas que constituyen el principal alimento de los roedores. |
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