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Omara, una diva en España
MADRID (SE).— La
presentación de Omara Portuondo esta semana en la capital española,
mereció los más altos elogios de la prensa madrileña y tuvo una
espectacular acogida del público.
Es algo que se viene
repitiendo a lo largo de la gira que por este país realiza en el verano
Omara para promover su más reciente producción discográfica.
En
las páginas de El País, Carlos Galilea, tras encomiar el excelente
acompañamiento orquestal, escribió: "Después de toda una vida cantando,
Omara Portuondo se siente casi como si estuviera empezando. Para No me
llores más, número de Arsenio Rodríguez, contó con un tresero de
alcurnia: Papi Oviedo. El joven Miguelito Valdés, que rindió homenaje a
su maestro El Guajiro Mirabal —con cita incluida de Ay, mamá Inés—
tiene ya perfilado ese sonido hiriente y directo al mentón de la mejor
escuela cubana de trompeta; la prestación de Roberto Fonseca permitió
intuir el potencial de este pianista de 27 años en un soberbio Bésame
mucho, de la mexicana Consuelo Velázquez, que Omara Portuondo empezó a
media voz y finalizó soltándose la garganta ante el entusiasmo del
público. No estaba en el guión, pero qué bueno que se lo saltó. La
emoción de regresar a Madrid pudo con ella y la hizo cantar,
inesperadamente, Amigas (...). En su memoria tenía presente la última
vez que la interpretó: a dúo con su amiga Elena Burke, la Señora
Sentimiento, poco antes de que esta falleciera, el pasado 9 de junio en La
Habana".
Y prosiguió diciendo: "Omara
Portuondo conserva esa alegría escénica que desarrolló con Las Mulatas
de Fuego, y que cultivó luego con el extraordinario cuarteto D'Aida, y
también una especial sensibilidad para el bolero de siempre, como en Ella
y yo, en la clásica Veinte años o en una adaptación al español de
The
man I love, de los hermanos Gershwin, en la que se la escucha decir 'no
puedo soportar las ganas de llorar'. Quizá sea la última grande de la
canción cubana, la única con el duende de las verdaderas estrellas. Por
si todavía no se había dado cuenta, nos es imprescindible".
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