¡Se rompió el modem...!

Una frase de moda en estos días de lluvias. Sencillos consejos para
evitar daños en las conexiones a Internet y los correos electrónicos

Alexis Schlachter

Con las manos en la cabeza, ojos casi en blanco y una voz apenas perceptible, alguien dijo una frase que, a pesar de todo, se escuchó en la oficina como sentencia a pena capital: "... se me rompió el modem".

Afuera llovía suavemente sin que se escuchara ni el más mínimo trueno.

El modem de arriba es exterior y el otro se encuentra dentro de la computadora. Sea 
uno u otro, una simple, inesperada y
accidental transmisión de energía eléctrica
por las líneas telefónicas equivale a
quedarnos sin correo electrónico ni Internet.

Ese detalle, precisamente, motivó que todos se miraran extrañados. Algo invisible había inutilizado definitivamente el modem del compañero de trabajo, ese vital equipo que permite la comunicación de correos entre computadoras dentro y fuera del territorio nacional, mientras, de paso, el enigmático "accidente" descalabró la conexión con Internet.

¿Pudo evitarse este problema?

Sí, de una manera sencilla. De no tener a mano un sistema preventivo de las descargas eléctricas, todo lo que hay que hacer es desconectar el modem de la línea telefónica hasta tanto no se vaya a utilizar... ¡y ya, fuera peligro, así caigan miles de rayos en nuestra ausencia!

En el caso descrito, común por estos días lluviosos en todo el territorio nacional, simplemente la casualidad quiso que la línea telefónica a la cual estaba conectado el modem de nuestra historia, se balanceara movida por los vientos y chocara con otra línea —pero eléctrica— que le transmitió su carga de inmediato. A veces, ni siquiera esto ocurre pues hay lo que se llama en electricidad inducción de la corriente, aún a cierta distancia.

Dejar conectado —aunque no se utilice— el modem a la línea telefónica es un riesgo innecesario, y fácil de resolver con solo una simple desconexión. A propósito... ¿dejó puesto el plug telefónico de su modem en la oficina toda la noche y ahora está lloviendo desde el amanecer? ¡Ojalá tenga suerte y nada le haya sucedido al equipo!

Otro consejo, si me lo permite, y esta vez no tiene que ver con la lluvia.

En los sistemas modernos para correo electrónico se ofrece la oportunidad no sólo de saber cuántos mensajes ha recibido su computadora sino, simultáneamente, qué dice el que esté marcado en ese momento aunque usted no haya decidido previamente abrirlo (Vista previa). O sea, se visualizan al mismo tiempo los correos y uno de los mensajes recibidos al margen de su voluntad, como un simple servicio añadido.

¡Peligro! Las nuevas variedades de virus informáticos no necesitan algo más que esto para realizar automáticamente su fatal "trabajo". El sistema operativo Windows, el más extendido entre nosotros, permite evitar el problema con solo estos pasos, una vez haya abierto el sistema para conectar los correos electrónicos:

1- Ir a la opción Ver .
2- Allí seleccionar Vista previa y eliminar la presentación automática del texto de los mensajes recibidos.

Usted entonces podrá decidir, sin peligro, cuáles mensajes son seguros y de procedencia conocida, y cuántos será mejor borrar por tener indicativos sospechosos (remitente desconocido, anuncio no solicitado, etc.) sin que sea necesario leer el texto donde pudieran alojarse los temidos virus.

A propósito de estos fatales elementos enemigos de todas las computadoras del mundo, recuerde, sólo recuerde, que el mejor sistema antivirus es tan bueno como su última actualización. Aquí, de poco vale la fama del producto utilizado porque esa cualidad no frena los ataques del enemigo.

Mantenga siempre al día la lista de sus antivirus para evitar sorpresas indeseables.

Finalmente, algo también sencillo, pero que causa problemas a largo plazo.

Si tiene su computadora funcionando ahora mismo sobre un escritorio con gavetas, evite sacudidas fuertes al cerrar o abrir el mueble, pues los movimientos bruscos afectan al disco duro de la máquina hasta el punto de inutilizarlo. Por favor, no trate de comprobarlo...

Son consejos sencillos... pero le evitarán más de un dolor de cabeza.