Golpistas en Venezuela atropellan derechos humanos

Testimonios en la Mesa Redonda confirman golpe de Estado contra Chávez, quien se considera un Presidente preso. Detenciones y atropellos contra funcionarios y simpatizantes del proceso bolivariano

ORLANDO ORAMAS LEÓN

La comunión de la cúpula empresarial, los medios de comunicación, la aristocracia sindical y el generalato de las fuerzas armadas condujeron el golpe de Estado contra el presidente Hugo Chávez, e instauraron un régimen de facto que comete serias violaciones a los derechos humanos en Venezuela.

Ello fue corroborado en la Mesa Redonda Informativa de ayer, por los testimonios y declaraciones, desde esa nación, de ministros y funcionarios del gobierno constitucional derrocado con la misma receta con la que fue instaurado Pinochet y asesinado Salvador Allende en Chile, hará pronto 29 años.

Quedó claro cómo los medios de difusión, en manos de los poderes económicos, fueron un arma para la mentira, la subversión y la incitación al golpe, en el que la agrupación empresarial, FEDECÁMARAS, sustituyó a los desarticulados partidos políticos tradicionales y se convirtió en el principal bando opositor, que llegó a usurpar el poder político de la mano de la cúpula militar.

LA GÉNESIS DEL GOLPE

Los planes para derrocar al presidente Hugo Chávez se remontan al propio inicio del proceso bolivariano. Una de las fórmulas fue descapitalizar al país, más de 23 000 millones de dólares en los últimos años, explicó Eduardo Dimas.

La sistemática campaña de prensa contra el gobierno chavista, la búsqueda de conflictos sociales y manifestaciones de provocación, se sumaron hasta la situación que conllevó al derrocamiento del gobierno constitucional.

El seis de abril la dirección ilegal de la Confederación de Trabajadores de Venezuela (CTV) y la cúpula de FEDECÁMARAS anunciaron un paro de 24 horas en apoyo a los gerentes de Petróleos de Venezuela, destituidos por incitar al paro en la principal empresa económica del país.

La cúpula sindical y empresarial deciden prorrogar por 48 horas la huelga y el 10 de abril hacerla indefinida, lo que da origen a las manifestaciones que condujeron al desenlace golpista.

El 10 de abril, a las 6 y 45 de la tarde, el presidente Chávez convocó a los medios televisivos para denunciar la intentona a la opinión pública. Revela la participación de esos medios de comunicación que instaban a la insurrección y al avance de la manifestación opositora hacia el Palacio de Miraflores.

En su intervención desmintió que había sido detenido y algunas de esas cadenas dejaron de transmitir la alocución del mandatario y, por el contrario, instaron y dieron cobertura total a las manifestaciones desestabilizadoras. Las fuerzas que fueron azuzadas a asaltar el Palacio iban acompañadas por efectivos de la Policía Metropolitana, vestidos de civil. La Policía Metropolitana está subordinada a la Alcaldía Mayor de Caracas, dirigida por Alfredo Peña, contrarrevolucionario opositor a Chávez.

En ese momento estaban apostados a unos 200 metros del Palacio Presidencial algunos francotiradores de la Policía Metropolitana que dispararon contra la manifestación chavista.

También hubo provocaciones contra la Guardia Presidencial que custodiaba el Palacio y se produjeron los disparos que provocaron un saldo de 10 muertos y numerosos heridos, en su mayoría simpatizantes del Presidente constitucional.

Eran los hechos de sangre que se buscaba provocar para darle un pretexto al golpe de Estado que se había estado preparando, dijo Rogelio Polanco, director de Juventud Rebelde.

Esa misma noche el comandante del Ejército, general Lucas Rincón Romero, dio una declaración en la que dice que los militares están a cargo de la situación y que el mando de la institución solicitó la renuncia del mandatario. Pocas horas antes, el propio Lucas Rincón había expresado públicamente su respaldo al jefe de Estado.

Fue el general Efraín Vázquez quien informó que Chávez estaba recluido en el fuerte Tiuna, en Caracas. Un cable de AFP dijo que el ex mandatario había salido del Palacio de Miraflores en horas de la madrugada, muy serio, con la vista fija al frente y vestido de uniforme.

En la Mesa se escuchó la entrevista, vía telefónica, que le hiciera Randy Alonso a María Gabriela Chávez. Ella desmintió que su padre hubiera renunciado. Nos dijo que le comunicáramos al mundo entero que en ningún momento hubiera renunciado, que fue detenido por los militares. "Soy un Presidente preso", dijo Chávez a su hija mayor en conversación telefónica.

Apuntó que se había comunicado con el vicepresidente Diosdado Cabello, quien le comentó la necesidad de denunciar el golpe de Estado a todo el mundo.

La hija de Chávez dijo que varios funcionarios del gobierno bolivariano han sido detenidos y secuestrados, mientras que otros se mantienen en la clandestinidad. Es una dictadura de extrema derecha, están buscando a los simpatizantes del gobierno para detenerlos, enfatizó.

El golpe de Estado ha afectado todas las instituciones del país, con la revocación del Parlamento, de los jueces del Tribunal Supremo, del Fiscal General, gobernadores, en fin, todas las autoridades electas en la votación popular más alta que se registra en los últimos 50 años.

Lázaro Barrero explicó que FEDECÁMARAS es la agrupación gremial de los empresarios venezolanos más vinculados al capital transnacional. Hoy todos esos empresarios gritaban democracia cuando se daban a conocer, de facto, las medidas de revancha que intentan poner fin a las legítimas instituciones, parlamentarios y leyes promovidas por el gobierno depuesto por el equipo golpista que encabeza Pedro Carmona, el presidente de FEDECÁMARAS.

Julio Montes, embajador de la República Bolivariana de Venezuela, quien permaneció durante toda la noche del jueves con Chávez en e Palacio de Miraflores, también habló para la Mesa Redonda Informativa.

Ayer hubo una maquinaria para el golpe de Estado, puntualizó. Fue una provocación contra la concentración del pueblo con Chávez, habían desguarnecido el Palacio, se dio la imagen de ingobernabilidad y los generales fueron traicionando uno tras otro. Estuvimos en Palacio hasta última hora y se le exigía al Presidente la renuncia o la inmolación y el Presidente no renunció, fue detenido.

Se produce un gobierno de facto, fuera de la Constitución y hoy hay una cacería de brujas, se ha violentado la inmunidad parlamentaria, hay una lista, se busca a los ministros del gobierno, se allanan las instituciones y se están "sembrando armas" para justificar tales acciones, denunció.

Los gobernadores de Táchira, Portuguesa, Lara, Mérida, entre otros estados, han dicho que desconocen al gobierno de facto. También el Fiscal General de la República, quien logró hacer pública la denuncia en la televisión sobre el golpe de Estado.

La lucha continúa, Chávez es un símbolo que se va a potenciar. Ya la gente comienza a pedir que lo liberen y esto es una gran enseñanza para los pueblos, del poder de los medios de comunicación, de los que detentan el poder económico, del imperio, y dan al traste con una esperanza de este pueblo y de este continente por un tiempo, porque las fuerzas y las reservas están, concluyó el embajador.

La colega Juana Carrasco habló sobre el papel que ha jugado el cabecilla de la Confederación de Trabajadores de Venezuela, Carlos Ortega, quien ahora exhorta a la persecución de los funcionarios del gobierno constitucional. La CTV ha sido una agrupación cuyos directivos han sido designados tradicionalmente por las cúpulas de los partidos tradicionales que se turnaron en el poder en los últimos 50 años.

Está en el cargo luego de elecciones fraudulentas en las que robaron urnas, quemaron colegios electorales y utilizaron la coacción y los mismos instrumentos de violencia que se repiten ahora con el golpe de Estado. Desde su puesto ha impulsado las acciones de desestabilización en alianza con la elite empresarial, con el propósito declarado de derrocar al proceso bolivariano.

Mientras tanto, su padrino, el ex presidente Carlos Andrés Pérez, partícipe desde su refugio en República Dominicana de los planes de desestabilización, se mostró eufórico en la CNN. Es el mismo personaje que bañó en sangre al pueblo venezolano durante el Caracazo, durante su segundo mandato, y quien robó las arcas del Estado.

Aristóbulo Isturiz, ministro de Educación del gobierno derrocado, dio declaraciones a la Mesa Redonda.

Estuve con el Presidente hasta el final y nunca renunció, le dijo a los golpistas que eran un gobierno de facto, que iba preso, pero nunca les firmaría la renuncia. Le dijeron que si no se entregaba atacarían el Palacio y él nos dijo que evitáramos un baño de sangre, que nos reserváramos para la lucha. Él fue detenido y se encuentra incomunicado.

Ahora mueven a turbas para apresar a los ministros y diputados, empujan y golpean a los detenidos y sus familiares. Dicen que soy de los más buscados y que no nos han conseguido, lo cual es mentira, porque he estado en mi casa.

No nos permiten hablar en la Radio de Venezuela ni en los periódicos, nos mantienen incomunicados de los medios de comunicación. Esta gente en seis horas han hecho un desastre en materia de derechos humanos, con los atropellos, el escarnio público, allanaron la casa de mi madre, de mi hermana y van a venir por mí.

Tememos por la vida del Presidente Chávez y si algo duró la negociación fue que pusimos como condición la vida del Presidente, pedimos que los organismos internacionales velen por la vida del Presidente y de los funcionarios de su gobierno.

Se nos abre un panorama duro y difícil, sabemos que es parte de la lucha, vamos a retomar en cualquier momento la conducción del proceso revolucionario y palante, concluyó.

Un cable de AFP informó que el Defensor del Pueblo venezolano Germán Mandarain denunció que hay una masiva violación de derechos humanos, vinculada a una cruzada de venganza. Así habló en declaraciones a una emisora en las que repudió las detenciones televisadas que tienen lugar en Venezuela.

Fue la guerra de los medios privados de comunicación que durante meses atacó sistemáticamente al proceso chavista. Fue la comunión de estos sectores con la cúpula empresarial. Los medios instigaron la violencia y el golpe de Estado, al que se sumaron también cadenas internacionales que dieron una sola visión de los acontecimientos.

Se estuvo buscando un Pinochet por parte de las televisoras, con jefes militares, hablando uno tras otros frente a las cámaras.

A ellos se había sumado la tristemente conocida Sociedad Interamericana de Prensa, que ahora silencia las violaciones a los derechos humanos y el golpe de Estado, indicó Rogelio Polanco.

El fiscal general venezolano, Isaías Rodríguez, afirmó que el Presidente Chávez no ha renunciado. No hay constancia escrita de su renuncia, por lo cual sigue siendo el Presidente. Indicó que en el caso que haya renunciado, tiene que hacerlo ante la Asamblea Nacional, y solo si este órgano la acepta.

El Presidente de la República en este momento está privado de libertad, está incomunicado, ni siquiera se le ha permitido acceso al Ministerio Público, denunció.

Hay una violación total y absoluta de la Convención Interamericana de los Derechos Humanos. Hay un Estado de facto, hay un Estado inconstitucional. Por otra parte, al Presidente lo sustituye el Vicepresidente y no hay constancia de que el Vicepresidente haya renunciado. Y en tal caso le corresponde por la Constitución la presidencia de la República al presidente de la Asamblea Nacional, puntualizó.

Wiliam Lara, presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, dijo que había una asfixiante maniobra para disfrazar la dictadura en marcha en Venezuela, la cual calificó de régimen ilegítimo e ilegal. Sus declaraciones a la televisión, finalmente, fueron sacadas del aire.

Mientras tanto, en la OEA hay muy poco ambiente para invocar la llamada Carta Democrática, por la cual supuestamente se aislaría a cualquier nación, miembro de la agrupación, donde fuera quebrantado el orden constitucional.

El vocero de la Casa Blanca, Ari Flescher, achacó a Chávez la responsabilidad por los incidentes. Estados Unidos elogió a las fuerzas armadas venezolanas. El FMI dijo que estaba listo para trabajar con el gobierno de facto. El Grupo de Rio condenó lo que llamó ruptura de orden constitucional en Venezuela.

Al respecto, Randy Alonso dijo lo siguiente:

Quisiera darle a conocer a nuestro pueblo y a la opinión pública internacional que las últimas noticias que nos llegaron aproximadamente a las 6 y 15 de la tarde, alrededor de los acontecimientos que tienen lugar en torno a nuestra Embajada en Venezuela son que alrededor de las cuatro de la tarde, en medio del bullicio ensordecedor de la turba que cerca la Embajada, le avisan al Embajador que el jefe de la Policía Metropolitana quería reunirse con el Embajador. Al informarlo a Cuba, se le indicó cerciorarse si realmente ese alto jefe deseaba reunirse con él, en cuyo caso se le autorizara a entrar.

Llegó realmente acompañado de dos personas más, un representante de la alcaldía mayor, en nombre del alcalde Peña y el alcalde del muncipio Baruta, Enrique Capriles, quienes solicitaron adicionalmente la presencia de los re-presentantes de los canales 33 y 2.

Germán, nuestro Embajador, señaló que esas personas, instigadas por un pequeño grupo, se prestaron a destruir vehículos, cortar agua y electricidad, y hablaron incluso de impedir acceso a la comida, situación que podría llegar a ser de incalculables consecuencias y que si se producía una penetración, nuestro personal defendería la Embajada aun al costo de sus vidas.

Ellos dijeron que la gente estaba afuera porque sospechaban que allí estaban Diosdado Cabello y otros ministros. Germán lo desmintió. Preguntaron si se les daría asilo en caso de que lo solicitaran. Germán respondió que era potestad del que otorga, el asilo decidir.

Pidieron hacer un recorrido amable, es decir, una inspección por la Embajada, para comprobar que no estaban allí Diosdado y los otros. Lo justificaron señalando que "a ellos la multitud sí les creerían y a Germán no".

Germán rechazó asegurando que en 40 años no habíamos aceptado jamás una inspección. Intentaron entonces que la inspección la hiciera el embajador noruego, qien se brindó. Germán le agradeció su amabilidad y le explicó las agresiones y atropellos que la Embajada sufría.

Germán aseguró la determinación del personal de defender la Embajada, en la que había incluso cinco mujeres y un niño. Finalmente, el jefe de la Policía Metropolitana, el representante del Alcalde Mayor y el alcalde de Baruta, prometieron que asegurarían que la turba no entrara en la Embajada. Veremos qué ocurre.

El Ministerio de Relaciones Exteriores ha informado de esta situación al Secretario General de las Naciones Unidas, al presidente del Consejo de Seguridad, al Movimiento de Países No Alineados y a un numeroso grupo de embajadores acreditados en Cuba y Caracas.

La responsabilidad de cualquier desenlace violento corresponderá a los golpistas y a quien ha asumido ilegalmente la presidencia del noble y sufrido país venezolano.