Pedro Mora

MANZANILLO.—La seguridad de que el Partido en el territorio está más fortalecido en su base para acometer las importantes misiones confiadas, quedó evidenciada en la asamblea de balance del comité municipal, primera del proceso en Granma.

El papel de núcleos y militantes en la continuación de la batalla de ideas, contó con ejemplos como el del curso de superación cultural para jóvenes de 17 a 30 años, en el que han introducido la celebración de mesas redondas con los propios estudiantes, sobre aspectos de interés.

Acerca del traslado de productos desde organopónicos y huertos distantes, los criterios estuvieron centrados en evitar la aparición de intermediarios que elevan los precios y afectan a la población.

Hacia el desarrollo de la agricultura urbana, Manzanillo trabaja en la construcción de huertos y organopónicos en 182 hectáreas, para alcanzar el per cápita de 300 gramos por habitante y propiciar nuevas fuentes de empleo. Se precisó que la captación de fuerza laboral requiere de ágiles medidas.

Predominó el compromiso de cumplir el plan azucarero del central La Demajagua, del municipio, y en ese sentido se abordó la producción cañera y el incumplimiento en varias unidades de la siembra, deficiencias en la limpia, dificultades con la vinculación de los salarios a los resultados finales y reducidas jornadas laborales.

Al respecto José Ramón Machado Ventura, miembro del Buró Político, enfatizó en el papel del Partido con la sección sindical, la administración y las demás organizaciones para conseguir la unidad, detectar los problemas y resolverlos en beneficio de la principal actividad económica del país. Contradictoriamente, mientras existen muchas áreas con pobres rendimientos dentro de los límites del ingenio manzanillero, la CPA Omar Rivero en las mismas tierras alcanza promedio superior a las 100 000 arrobas por caballería, organiza bien su fuerza y consolida la atención al hombre y su familia como ejemplo digno de imitar.

Juan del Castillo, su presidente, al intervenir relató que los resultados se deben a jornadas entre ocho y diez horas de trabajo, resolver a los cooperativistas necesidades alimentarias, y de otros tipos, y al papel protagónico desempeñado por el núcleo del Partido.

En las conclusiones, Lázaro Expósito Canto, integrante del Comité Central y primer secretario del Partido en la provincia, destacó la profundidad de los debates, reiteró la necesidad de preparar a los cuadros y exhortó al nuevo comité municipal a trabajar para situar el territorio a la altura requerida por la dirección del país.