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Una cifra que infunde bienestar Muestra Matanzas la más baja tasa de mortalidad infantil de su historia, lo cual significa, entre otros resultados, 17 fallecidos menos que en igual período del año pasado Ventura de Jesús MATANZAS.— La inmensa mayoría de los casi 7 000 niños que han venido al mundo en esta provincia en el 2001 viven y gozan de buena salud. La tasa de mortalidad infantil de 4,3 por cada mil nacidos vivos menores de un año, la más baja de su historia, es una cifra que reporta mucha alegría y bienestar en los hogares matanceros. A pesar de los incontables escollos que ocasiona el bloqueo, durante el actual año han fallecido 17 niños menos que en igual período del 2000. La única explicación posible se encuentra en la preocupación perenne del Estado por el programa materno-infantil y la consagración e inteligencia de miles y miles de trabajadores del sector de la salud en un sistema que se perfecciona cada año. El propósito es tratar de salvar a toda costa la vida de los menores, explicó a Granma Ondina Ramos, quien atiende en el territorio el programa materno infantil. Según la especialista este resultado se corresponde con la tendencia de la provincia desde hace casi una década, caracterizada por la disminución gradual de las defunciones. Señaló que en esta ocasión los decesos se produjeron a causa de afecciones prenatales y anomalías congénitas no diagnosticables. Dijo que también reviste importancia el hecho de mantener el favorable índice de nacidos con bajo peso, con 5,4 por ciento. En ese sentido el doctor Ernesto López Letucet, director provincial de Salud, destacó de manera especial el desempeño del personal especializado en las salas de neonatología y unidades de terapia intensiva, aunque comentó que el éxito obedece al trabajo mancomunado de muchas personas, en el que tienen un lugar destacado el médico y la enfermera de la familia. Aprovechó la ocasión para reconocer de igual modo a los municipios de Varadero, Los Arabos, Pedro Betancourt y Martí, territorios donde no se reportan defunciones en menores de un año en lo que va del 2001. Con este saldo se vislumbra
para Matanzas la posibilidad cierta de terminar con una tasa por debajo de
4,6, que sería la más baja en la historia para una provincia. |
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