Nacionales
Internacionales
Culturales
Deportivas
15/12/2001
Portada de hoy

Tras las huellas del huracán Michelle

La singular "aventura" de Diancy la matancera

VENTURA DE JESÚS

MATANZAS.— Para Diancy Zamora construir su propia casa ha sido una aventura singular. Esta joven de 33 años nunca había tenido una cuchara en sus manos. Ahora dice, sin riesgo de error, que ya es casi una albañil. "Ya sé replantear una vivienda, hacer mezcla y dar pico y pala".

Diancy Zamora, vecina del barrio de Versalles, sostiene que no le ha faltado la ayuda de sus amistades.

Así sucede con muchos. La figura física de los damnificados que levantan su casa no tiene nada que ver con el tradicional constructor. La galería de hombres y mujeres que se ven por estos días en el ajetreo de sus viviendas proyectan una visión pintoresca.

El rasgo menos visible, oculto a los ojos de los intrusos, es la disposición de todos por reponerse definitivamente del desastre que les causó la voracidad del huracán Michelle. En este empeño también se forja la solidaridad de amigos y compañeros de trabajo.

EMSUNA 2

La innegable virtud de estos constructores de nuevo tipo se aprecia claramente en el reparto Iglesias, en la ciudad de Matanzas, donde se construyen las primeras viviendas de un programa total de 92. Se trata del principal asentamiento para los damnificados en el municipio cabecera. "En estos momentos trabajamos en 39 casas, todas en ejecución", asegura Gualberto Rosales, jefe de obra.

Explica que los afectados provienen de diversos barrios de la capital, especialmente del punto conocido como Los Bañitos, en Versalles, y de la zona del Chiquirrín, en Pueblo Nuevo. "Estas familias cuentan con la asesoría técnica del Contingente IV Congreso del MICONS", comenta el experimentado constructor.

Dijo además que hasta la fecha han dispuesto de los materiales necesarios, y le confirió un papel decisivo a la ayuda brindada por el Gobierno, instituciones y pueblo en general de Venezuela consistente en un donativo de cemento, cabillas, listones de madera, bloques de ladrillo y otros materiales de construcción.

Carlos de León Salgado, presidente del Consejo Popular de Pueblo Nuevo, reconoció en nombre de todos este aporte solidario y significó que esos recursos se emplean en las obras sin que nadie haya quedado exceptuado. Así lo confirmó Alejandrina Juana García. "Estamos muy contentos por esa ayuda y en particular por lo que simboliza. Eso también contribuirá a recuperarnos con inmediatez", precisó.

Esta mujer asegura haberlo perdido todo: "Mi casa daba a la bahía, y con los vientos y la penetración del mar lo perdí todo, hasta la cama, el colchón, la cocina y parte de la ropa. Pero tengo la esperanza de que dentro de dos meses más o menos tendré una casa mucho más confortable y cómoda. Afortunadamente cuento con el respaldo de mi familia y amistades. Estoy loca por terminar".

EL PAPEL DE LOS TÉCNICOS

Los técnicos hacen valer aquí su misión de asesorar, orientar y controlar la calidad. Lo que ocurre en este lugar, en opinión de Patria Céspedes, técnica a pie de obra, revela su parentesco con lo que se hace hoy en los principales asentamientos de la provincia.

"Velamos especialmente por la calidad de la obra, enseñar cómo se coloca el bloque, la dosificación del mortero, cómo correr los niveles para que el bloque quede derecho, en fin, lo que sea preciso con tal de que todo salga bien, pues a ellos no podemos juzgarlos en términos estrictamente constructivos".

Las nuevas moradas que se levantan en EMSUNA 2, refiere Patria, son del tipo dúplex, que cuentan en la planta baja con cocina-comedor, baño, paso de escalera, sala y portal, y en los altos tienen los dormitorios. El techo es de vigas y lozas.

Por su parte, Carlos de León añadió que desde el mismo comienzo ha existido un comportamiento personal caracterizado por la disciplina y organización de los damnificados, aunque no falta la vigilancia y se ha establecido un control para evitar pérdida o manejo dudoso de los recursos.

LUGAR COMÚN

Es casi un lugar común insistir en que los propios afectados son los mejores constructores que pueden inventarse. Nadie rechaza la maestría de los especialistas, pero sucede que no hay constructores profesionales para asumir el gran reto, por ejemplo, de levantar casi 8 000 viviendas en un año como es preciso en esta provincia.

Cuando ya los vientos despiadados de Michelle no sean más que un borroso recuerdo, seguirá resplandeciendo este heroico empeño de la Revolución por proteger a todos y cada uno de los damnificados del ciclón, propósito en el que alcanzó notable expresividad la actitud de las familias que construyeron sus propias casas.

Lo sintetizó a nuestra llegada la joven Diancy Zamora con toda la delicadeza de una mujer, pero con el frescor rudo de la constructora que empieza a reconocer su fortaleza. "Yo no sabía nada de esto. Nunca me interesó la construcción. Pero como ves, ya soy casi albañil en la extensión de la palabra".

15/12/2001

Subirtop.gif (129 bytes)

Portada de hoy