Una nueva terapia multidrogas para las personas enfermas de SIDA es aplicada en el Instituto de Medicina Tropical Pedro Kourí (IPK) de la capital, con resultados favorables.

El doctor Manuel Díaz Yidiz, responsable de hospitalización de la subdirección de asistencia médica de esa institución, explicó que desde su suministro en junio último, la mortalidad ha decrecido dada la poca aparición de enfermedades oportunistas, por lo que ha aumentado la expectativa de vida.

Reiteró que los pacientes con SIDA sufren un importante deterioro inmunológico, y destacó las ventajas de este tratamiento, mediante el cual el paciente regresa después a un estado más satisfactorio.

Recomendada por la Organización Mundial de la Salud (OMS), esta terapia antirretroviral es utilizada en el mundo, pero no con la magnitud de Cuba que está al alcance de todos los enfermos, precisó el especialista, quien elogió la calidad de esos medicamentos, producidos por la industria farmacéutica de la isla.

Aunque su costo se abarata, el país invierte una considerable suma en divisas para la compra de materia prima, si se tiene en cuenta que estos fármacos se aplican diariamente y en grandes dosis, y una vez que los enfermos comiencen el tratamiento no pueden suspenderlo.

Los medicamentos utilizados son el AZT (Zidovudina o Retrovir), 3TC (Lamivudina) y un inhibidor de proteasas (Indinavir o Crixivan).

Además se emplean otras alternativas como el d4T (Stavudina o Zerit) y el ddi (Didanosina o Videx) para combinaciones en algunos enfermos.

En los últimos años Cuba ha tenido notables resultados mediante el programa nacional del SIDA, que la sitúa entre los países más aventajados del mundo respecto a la sobrevivencia de esos pacientes y demora de la aparición de enfermedades oportunistas que convierten a los seropositivos en pacientes SIDA.

Entre sus ventajas esta terapia decrece la carga viral y los pacientes seropositivos van a experimentar de entrada una mejoría, trae consigo más perspectivas de sobrevivencia y por supuesto se espera una reducción en la aparición de casos SIDA.

El IPK, fundado en 1937, tiene la misión de brindar atención médica a personas aquejadas con enfermedades parasitarias, y profundizar en el estudio de la medicina tropical. Además ha desempeñado un rol muy importante en la lucha contra el dengue y la neuropatía epidémica, entre otras enfermedades. (AIN)