Una tormenta tropical que azotaba el oriente de China se había reducido hoy a un sistema de baja presión, que podía trasladarse hacia la provincia de Jiangxi, ya afectada por graves inundaciones, confirmaron funcionarios a DPA.

Autoridades locales dijeron que el río Yangtse abrió ayer una brecha de 600 metros de ancho en un dique provisional que protegía dos poblados, pereciendo por lo menos cuatro voluntarios de rescate que trataban de ayudar a centenares de personas a huir de la catástrofe.