 Ejemplaridad y disciplina en primer orden
Presidieron Machado Ventura y José Ramón Balaguer, en Pinar del
Río, primera asamblea provincial de la UJC. Las restantes del país se realizarán hasta
el tres de octubre

Ronal Suárez Ramos
PINAR DEL RIO.-La primera asamblea provincial previa al Séptimo
Congreso de la UJC, efectuada aquí, ratificó la decisión de la juventud comunista de
rectificar errores, consolidar avances y asumir con responsabilidad su papel como garante
de la continuidad histórica de la Revolución.
Presidida por los miembros del Buró Político del Partido, José
Ramón Machado Ventura y José Ramón Balaguer Cabrera, contó con la asistencia de los
350 delegados electos durante el proceso orgánico realizado desde la base y se
caracterizó por la claridad y el espíritu autocrítico de las numerosas intervenciones.
La ejemplaridad y la disciplina, dos aspectos básicos del trabajo
de la organización que se habían resquebrajado y en los que hoy se aprecian signos
alentadores, constituyó el centro de los debates, pues de ello, según se dijo, se
desprende todo lo demás.
Se reiteró que si un comité de base no es ejemplo, comenzando por
su funcionamiento, no puede ser atractivo para un joven obrero, campesino o estudiante
militar en él y si no educa a su militancia en los principios revolucionarios y
socialistas de manera cotidiana, no estará preparando su ingreso al Partido al cumplir la
edad requerida.
El accionar de la organización juvenil, con énfasis en los
sectores de educación y salud, el imperativo de que los procesos de crecimiento se
caractericen por su calidad, y la necesidad de que el trabajo político-ideológico se
desarrolle en primera instancia con los propios militantes para que después se proyecten
hacia el resto de cada colectivo, fueron otros temas tratados.
Ampliando la idea esbozada por un delegado en cuanto a que junto a
la disciplina y la exigencia debe estar la preocupación de la organización de base por
el joven que tiene un problema familiar o personal, José Ramón Balaguer acotó: "La
solidaridad humana entre nosotros, formando parte de la esencia de nuestros sentimientos,
es clave para enfrentar los retos que tenemos por delante".
Con una cerrada ovación, la asamblea saludó las palabras del
destacado pitcher del Equipo Cuba, José Ariel Contreras, quien se refirió al acoso que
enfrentan nuestros deportistas en sus salidas al exterior para que deserten, como una de
las formas de diversionismo ideológico que emplea el enemigo imperialista.
Otto Rivero, primer secretario del Comité Nacional de la UJC,
recordó los profundos señalamientos del Quinto Congreso del Partido a la UJC y los pasos
que posteriormente se han dado para retomar el papel de la juventud comunista.
Destacó la importancia de incentivar valores como la solidaridad y
la humildad, el estudio del pensamiento de Fidel convertido hoy en defensor de la
humanidad.
La asamblea eligió por votación directa y secreta a 97 delegados
que junto a los 13 seleccionados directamente en centros de producción, servicios o
docentes, componen la representación pinareña al Séptimo Congreso.
De igual forma aprobó a los 65 integrantes del nuevo Comité
Provincial y a su buró de once miembros, al frente de los cuales fue ratificado como
primer secretario Jorge Lázaro Valdés.
María del Carmen Concepción, integrante del Comité Central y
primera secretaria del Partido en la provincia, al hacer las conclusiones, significó la
coincidencia de los enfoques sobre los distintos tópicos tratados, con los que tuvieron
lugar en las reuniones de base y municipales, lo que indica la claridad del camino a
seguir.
Las asambleas provinciales de la UJC continuarán sesionando en lo
que resta de septiembre y hasta el tres de octubre con la correspondiente a Ciudad de La
Habana. El Séptimo Congreso ha sido fijado para los días ocho, nueve y diez de diciembre
próximo. |