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 Mañana en la Basílica
Vientos de Austria

Pedro de la Hoz
Tres jóvenes músicos austríacos son portadores de un variado
mensaje sonoro con el que aspiran a comunicarse con el público habanero mañana sábado,
a las 6:00 p.m., en la Basílica Menor de San Francisco de Asís y el domingo, a la misma
hora, en la sala Lecuona, del Gran Teatro de La Habana. Se trata del trío Colore,
integrado por el trompetista Bruno Dworzak, el trombonista Andreas Poindi y la cornista
Petra Weinwurn.
Tras haber coincidido los dos primeros en la Escuela Superior de
Música de Viena y entrar en contacto con la cornista, graduada del Conservatorio de
Praga, decidieron integrar una agrupación de cámara que abordara las más amplias
posibilidades de ese formato instrumental. De ahí que el trío Colore, ahora en Cuba
invitado por el Centro Nacional de la Música de Concierto y la Embajada de Austria en La
Habana, haya explorado, a lo largo de su corta pero intensa trayectoria -llevan tres años
de labor- diversas estancias, desde la música barroca hasta los autores contemporáneos.
De esta última vocación habla el hecho de haber encargado, para su
estreno mundial entre nosotros, una obra al compositor italiano Guido Mancusi, bajo el
sugerente título Trío dos contra uno. Mancusi, de 33 años, sobresale
por su actividad musical en Austria, donde ha sido director artístico del Chorus
Viennensis, de la Opera de Graz y en Alemania, país en el que se ha desempeñado como
asistente en el famoso Festival Wagner, de Bayreuth, y director de la orquesta del Teatro
del Estado Libre de Baviera.
En el programa de Colore figuran, entre otras obras, Cuatro
tiempos para trío de viento, del inglés Henry Purcell; una Sonatina, de Ludwig
van Beethoven; y el Divertimento KV 439b, de Wolfgang Amadeus Mozart. |