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NACIONALES |
Propósito de los cubanos
Lograr una industria azucarera de
excelencia, moderna y diversificadaLa base fundamental de la estrategia para el crecimiento sostenido a que el país aspira, a partir de la próxima zafra, es la eficiencia y la competitividad internacional
Juan Varela Pérez
Los cubanos trabajamos, confiados y entusiasmados, por una industria azucarera de excelencia, moderna y diversificada, proclamó ayer el general de división Ulises Rosales del Toro, titular del MINAZ.
Durante una intervención especial en la XIII sesión del Consejo de la Organización Internacional del Azúcar, en el Palacio de las Convenciones, manifestó que para ello no solamente contamos con las condiciones naturales del país, sino, además, con la fortaleza de nuestras tradiciones.
A esto se le suman una buena base científica y técnica. Aseguró que el fundamento de la estrategia cubana para el crecimiento sostenido a que aspiramos, a partir de la próxima zafra, pese al feroz bloqueo norteamericano, es la eficiencia y la competitividad internacional.
Mencionó, como elementos de influencia, la experiencia y la vocación de los trabajadores del sector, el perfeccionamiento empresarial y la introducción de métodos modernos de dirección y organización.
Ello hará posible, dijo, alcanzar los objetivos que nos hemos propuesto, la disminución progresiva de los costos y garantizar la calidad de nuestras producciones.
De igual modo, explicó, se trabaja de forma acelerada en la informatización y la automati-zación en el sector, como herramienta imprescindible en el mundo de hoy, para lograr verdadera efectividad en la gestión de dirección y administración.
Aseveró el Ministro que en el camino de maximizar la eficiencia se contempla la necesidad de paralizar algunas instalaciones industriales, al tiempo que se mejoren y modernicen las más eficientes.
Refirió que será imprescindible crecer en la disponibilidad de caña por vía del aumento de los rendimientos agrícolas, concentrando la producción en las áreas más apropiadas y con la aplicación acelerada y rigurosa de los avances tecnológicos.
En este punto mencionó la siembra de unas 27 000 caballerías en 1997, que representó el 30 por ciento sobre el ritmo promedio de los últimos años, volúmenes que deben repetirse este año y probablemente en los próximos.
A esto se une un grupo de medidas, de carácter técnico-organizativo, para lograr la edad adecuada de las cepas y la elevación de los rendimientos agrícolas que garantizarán un sostenido crecimiento a partir de la próxima zafra.
Actualizó a los representantes de los diferentes continentes que asisten al Consejo de la OIA y a Diversificación'98 sobre la situación de esta zafra y explicó que, gracias al extraordinario esfuerzo de nuestros trabajadores, en la primera semana del actual mes ya se habían sobrepasado los tres millones de toneladas y aún se mantienen en operaciones 35 fábricas, por lo que se pronostica que será posible cosechar las áreas programadas.
A propósito de los derivados, el titular del Azúcar anticipó que se trabaja para recuperar sus niveles productivos a un ritmo mucho más acelerado y constituir un aporte significativo a la economía y a la liquidez financiera del sector.
Calificó de prestigiosos y capaces a los centros de investigación y desarrollo los cuales, según dijo, jugarán un papel muy importante para guiar las acciones y materializar el conocimiento adquirido.