Una medalla de oro para el "Pelao"

Oscar Sánchez
Enviado especial de Granma

MARACAIBO, Venezuela.-Ayer fue un día especial para un bebé de dos meses, que todavía no sabe lo que significa el 19 de agosto de 1998. Pero su mamá, Kenia Rodríguez, la nueva campeona centroamericana y del Caribe de los 63 kilogramos en judo, le dedicó este triunfo.

Kenia Rodríguez y Gabriel Arteaga entre los ganadores de ayer.

"Es para él, para mi "Pelao", nos dijo cuando salió vencedora sobre la boricua Jessica García, a quien derrotó en el combate final por Ippón.

Kenia es una prueba más de la valía de la mujer cubana, de las judocas de la mejor escuadra del mundo. Solo un mes y unos días para prepararse. Como lo hizo Driulis en 1996, u Odalys Revé antes del mundial de 1995, o Legna Verdecia en el circuito Grand Prix de este mismo año.

"Era otro reto, no tanto por vencer aquí, donde se suponía que no tuviera problemas, sino porque tenía que responder a los parámetros físicos que exige cualquier competición", dijo visiblemente emocionado Ronaldo Veitía, entrenador de las judocas cubanas.

Ayer también triunfó Sibelis Veranes (70) con mucha facilidad, y mostrando su estabilidad ganadora, mientras los hombres, Gabriel Arteaga (81 kg) e Ihosvani Despaigne (90) hicieron el espectáculo de la segunda velada en estos Juegos.

Las ovaciones tras cada proyección justificaron las expectativas creadas. Ambos ganaron, igual que las muchachas sin que les marcaran puntos técnicos, y en el caso de ellos, siempre por Ippón.

"Trabajaron con eficacia arriba y cuando fue necesario controlaron con inmovilizaciones. Estoy satisfecho, pues el camino al mundial por equipos del próximo mes es el correcto", señaló el preparador Justo Noda.

Hoy las estelarísimas Driulis González y Legna Verdecia buscarán complacer a un público que ya las conoce por las menciones en la prensa, mientras Israel Hernández hará un estreno centrocaribeño en la división de 73 kilogramos y Manolo Poulot en los 66 hará lo mismo.