| NACIONALES |
Asociación de Combatientes de la Revolución Cubana
Concluyen en Ciego de Avila asambleas municipales de balance
Ortelio González Martínez
VENEZUELA, Ciego de Avila.-"Tenemos que mirarnos por dentro y comenzar por nuestra propia casa, porque es inadmisible que un hijo nuestro no trabaje y deambule por las calles, sin ninguna responsabilidad con la sociedad. Con ese mal ejemplo a quiénes les vamos a exigir".
Félix García Fernández fue categórico: "El ejemplo tiene que entrar por cada uno de nuestros hogares para después salir a convencer por la comunidad", aseveró al referirse al trabajo patriótico-militar de esa organización con las nuevas generaciones de cubanos.
El tema suscitó el mayor número de intervenciones entre los casi 100 delegados a la Conferencia de la Asociación de Combatientes de la Revolución Cubana (ACRC) en el territorio de Venezuela, con la cual concluyó ese proceso a nivel de municipio en la provincia de Ciego de Avila, donde participaron miles de combatientes de diferentes épocas, desde la lucha clandestina hasta los soldados internacionalistas que estuvieron en tierras africanas.
Cuando se hurga en la historia es posible comprender por qué la ACRC es el pueblo. En este rincón de la geografía avileña -como en muchos otros lugares del país-, no es una rareza hallar a hombres como José -Pepe- Valcárcel, quien en 1958 sirvió de práctico en toda la zona a la Columna 8 Ciro Redondo, comandada por el Che, y que a riesgo de su vida les ofreció comida y avituallamiento durante varios días.
Tampoco es una rareza encontrar a revolucionarios como el teniente coronel Efrén León Nápoles, integrante de la columna del legendario Comandante, y hoy ratificado al frente de la Asociación en el municipio, o jóvenes como Rosendo Sánchez -El Chino-, descendiente de mambí y combatiente en Angola.
No causa asombro que sin creerse una Mariana de estos tiempos Sabelia Echemendía Díaz sea la madre de cinco internacionalistas (dos en Angola y tres en Etiopía) "y me quedó otro que no fue llamado, pero estaba listo pa' partir a luchar a cualquier parte."
No hay diferencias, entonces, entre estos y todos los hombres y mujeres de hoy, mancomunados, dan su aporte en los diferentes frentes de batalla para burlar las carencias cotidianas y hacer más fuerte al país.