Ante las pérdidas por la sequía

Priorizan recursos para aumentar el riego de viandas y hortalizas

Destina el MINAGRI más de 3 000 000 de dólares para afrontar programas emergentes de los cultivos varios y la ganadería

Raisa Pagés

La prioridad de recursos para mantener con riego sembrados de plátano y cultivos de ciclo corto, esencialmente boniato, forma parte de las medidas adoptadas por el Ministerio de la Agricultura, para atenuar la baja producción originada por la sequía.

Las técnicas de riego más eficientes en el uso del agua, como la máquina de pivote central -que aparece en la foto- y el microjet, recibirán prioridad en la asignación de combustible.

Más de 3 000 000 de dólares ha destinado dicho Ministerio para afrontar los programas emergentes de los cultivos varios ante la complicada situación climática.

En esta campaña de primavera se perdieron 2 500 caballerías de maíz, calabaza y pepino, por los efectos de la acentuada ausencia de lluvias, en las provincias comprendidas desde Camagüey hasta Guantánamo.

En un reciente recorrido por esa zona se detectó que 2 119 fuentes de abasto vinculadas a los cultivos varios y la ganadería se han secado, lo cual complica el riego, aun cuando se disponga de combustible para regar en algunos lugares.

Las inclemencias climáticas se arrastran desde la pasada campaña de frío en los cultivos varios. En esa etapa las enrarecidas condiciones atmósfericas causaron un decrecimiento en la cosecha de papa de 2 500 000 quintales y unos 600 000 de tomate. También disminuyeron las producciones de pimiento, ajo y col.

Sin embargo, el panorama productivo de las viandas y hortalizas no es tan deprimente, pues hasta el cierre de julio se acumulaban 24 858 100 quintales, lo cual significa un crecimiento de 2 500 000 en estos renglones, en relación con igual etapa precedente.

Ese aumento global -que no cubre las demandas de la población siempre crecientes-, se debe a modestos incrementos reportados en plátano, yuca, malanga y boniato. También las hortalizas de hojas y condimentosas registran crecimientos, por la influencia del movimiento de organopónicos y huertos intensivos, el cual, ante la actual situación, resulta una alternativa provechosa, por ser una agricultura de bajos insumos.

PARA ATENUAR DAÑOS MAYORES EN LOS PROXIMOS MESES

El 40 por ciento de las áreas que se cultivan en la primavera es de secano y al carecerse de lluvias que humedezcan esos sembrados, se perjudica el desarrollo vegetativo del plátano y la yuca. Igual sucede con la malanga y el ñame de las zonas montañosas.

Los daños mayores en la producción se harán sentir más en los próximos meses, de ahí que el programa de emergencia priorice los cultivos de ciclo corto: boniato (a los cuatro meses se cosecha); maíz (ciclo de 90 días); calabaza (120 días); y pepino (60 días).

Unas 1 100 caballerías de riego localizado en el plátano recibirán recursos para que no les falten el combustible y los fertilizantes, como urea y potasio, informó Julio Gómez, viceministro de la Agricultura, en declaraciones para Granma.

Para garantizar producciones de diciembre a febrero próximos, se destinarán los insumos necesarios para regar y cultivar unas 250 caballerías de boniato en las provincias que van desde Camagüey hasta Guantánamo.

Con vistas a que hacia la capital no haya que trasladar viandas desde otros territorios, se asignarán recursos adicionales para mantener, con riego, unas 120 caballerías de boniato en La Habana. Asimismo se garantizarán a otras 60 caballerías de boniato, distribuidas entre Matanzas, Cienfuegos, Villa Clara, Sancti Spíritus y Ciego de Avila. Estas últimas plantaciones tienen como objetivo no sólo abastecer esos territorios, sino también enviar hacia la región oriental.

Donde quedan fuentes de abasto de agua sin agotar se prioriza, además, el completamiento de los sistemas de riego y así disponer de más área para el plátano y los cultivos de ciclo corto.

Dada la situación actual de Guantánamo y Granma, se decidió trasladar la siembra de papa de esas regiones -unas 50 caballerías- para Ciego de Avila, las cuales son adicionales a las 70-75 que cultivarán allí, con destino a Santiago de Cuba.

Si no hay recuperación en los próximos meses, habrá que reubicar, además, en el occidente y centro del país, otras 90 de papa planificadas en Las Tunas y Holguín.

Este programa emergente demanda, también adelantar siembras de tomate y col -unas 300 caballerías- en las zonas del occidente y centro de la Isla.