El
presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, agradeció a Fidel y Raúl por
hacer posible el sueño de esta reunión en una Cuba socialista,
libre, independiente y solidaria; gracias al heroísmo de este
pueblo, a la resistencia de este pueblo que ha sabido lidiar por más
de 55 años contra las múltiples agresiones del imperio.
Gracias a Cuba que nos da la fuerza para creer en
que las Revoluciones victoriosas son posibles y en la convicción de
que el socialismo es posible. Cuba es la mejor prueba de ello hoy
siendo la sede de esta reunión de los pueblos latinoamericanos y
caribeños, dijo Ortega.
En otro momento expresó que se intentó construir
un deseo y voluntad cuando se libraban las batallas por la
independencia en toda nuestra región, cuando se dio el momento de
unidad tanto en el Sur de Nuestra América como en Centroamérica,
pero no fue posible.
En ese sentido, manifestó que las debilidades de
nuestros países y el peso de un imperialismo que se expandía por
toda la región no permitieron concretar el sueño de los libertadores
de alcanzar la verdadera y definitiva independencia.
Sin embargo, indicó que ahora hemos retomado el
camino, hemos alcanzado un alto grado de madurez los
latinoamericanos y caribeños.
En esta cumbre, más allá de ideologías e
intereses particulares, trabajamos bajo el principio de la unidad en
la diversidad, la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños
(CELAC) ha dado sus primeros pasos, manifestó el Presidente de
Nicaragua.