Situados en los hemisferios oriental y occidental, China y Cuba son países socialistas guiados por el Partido Comunista, y ambos están estrechamente vinculados por sus ideales y creencias comunes.
Durante mucho tiempo se han apoyado mutuamente en la construcción del socialismo, aprenden uno del otro y unen sus manos para promover el desarrollo, la revitalización y la modernización de sus respectivos países.
Tras visitar Cuba en 2014, el secretario general y presidente, Xi Jinping, llamó a iniciar un mecanismo de seminarios teóricos que se han celebrado hasta ahora en cinco ocasiones.
Hemos sostenido profundos intercambios bajo la conducción del Partido Comunista en la construcción socialista, lo cual impulsa el desarrollo en el camino para alcanzar los objetivos del socialismo. Estos encuentros se han convertido en una importante plataforma para el intercambio de experiencias.
DEFENDEMOS EL RESPETO MUTUO Y EL ALTO GRADO DE CONFIANZA RECÍPROCA
Los dos Partidos son la vanguardia que guía en el camino al socialismo, a la luz de sus propias condiciones nacionales, y abogan por combinar los principios del marxismo con sus propias prácticas y culturas tradicionales. Ambas organizaciones promueven constantemente el aprendizaje del marxismo.
El Partido Comunista de China (PCCH) nunca impone su modelo, ni pide a otros países que lo copien. Las dos organizaciones –cubana y china– confían una en la otra, e intercambian sus experiencias exitosas sin reservas.
Admiramos sinceramente los logros del Partido Comunista de Cuba en el desarrollo económico y social, a través de su resistencia creativa, bajo las difíciles condiciones del prolongado y brutal bloqueo estadounidense.
EL PARTIDO DIRIGE Y EL PUEBLO ES LO PRIMERO
Como centro dirigente de la causa socialista en ambos países, el nivel de dirección del Partido determina el futuro de las dos naciones.
El fortalecimiento de la construcción del Partido ha sido siempre un tema importante en el ámbito de las discusiones teóricas. También preocupa el robustecimiento de la dirección general, la administración rigurosa, la promoción de la autorrevolución y la elevación de la capacidad de gobierno. Esos son los ejes temáticos en la dirección de los esfuerzos conjuntos de estos Partidos.
Poner al pueblo en el centro, crear más bienestar para este y promover el desarrollo humano integral son los puntos de partida y de llegada fundamentales de la gobernanza de estas agrupaciones políticas.
PROFUNDIZAR LA REFORMA Y PROMOVER EL DESARROLLO
La reforma y la innovación son una opción inevitable para lograr la modernización socialista. Entrando en la nueva era, China continuó profundizando la reforma de manera integral, y Cuba promueve la renovación de su modelo económico y social, convirtiéndose la reforma y la innovación en las palabras claves de los seminarios teóricos mencionados.
No hace mucho, se celebraron con éxito el III Pleno del XX Comité Central del Partido Comunista de China y el viii Pleno del Comité Central del Partido Comunista de Cuba, en los que se tomaron nuevas disposiciones para seguir profundizando las transformaciones en sus respectivos países.
Ambas partes aprovechan la oportunidad para profundizar los intercambios y el entendimiento mutuo, promover la modernización del sistema de gobernanza, así como la capacidad de gobierno de sus respectivos países. Se trata de aprovechar mejor las ventajas del sistema socialista y de promover un desarrollo integral y sostenible.
OPOSICIÓN A LA HEGEMONÍA Y DEFENDER LA JUSTICIA
Los dos Partidos tienen puntos de vista similares sobre los principales asuntos internacionales, abogan por un multilateralismo auténtico, se oponen a toda hegemonía y política de poder, y defienden firmemente la paz mundial.
A través de discusiones teóricas, los dos Partidos coordinan sus posiciones sobre cuestiones internacionales y regionales candentes, y se pronuncian conjuntamente en defensa de los derechos e intereses comunes del gran número de países en desarrollo, y del mantenimiento de la justicia internacional.
Los dirigentes del Partido y del Estado cubanos respondieron positivamente a las tres grandes iniciativas globales planteadas por el secretario general Xi Jinping, y se han esforzado concertadamente para promover la construcción de una comunidad de destino humano.
Este año se cumple el aniversario 75 de la fundación de la Nueva China, el 65 del triunfo de la Revolución Cubana y décimo de la visita del Presidente Xi Jinping a Cuba, así como los diez años de la apertura de las discusiones teóricas entre ambas partes. En 2025 celebraremos el aniversario 65 del establecimiento de relaciones diplomáticas.
Con este importante telón de fondo, se celebra en La Habana el vi Seminario Teórico sobre el tema «Impulsar la causa de la construcción socialista y edificar una comunidad de destino compartido».
Mantendremos, también, un profundo intercambio de puntos de vista sobre la aplicación del importante consenso alcanzado por los máximos dirigentes de los dos Partidos, la promoción de la construcción de una comunidad de destino compartido entre China y Cuba, y la respuesta conjunta a los cada vez más graves desafíos globales, a fin de reunir sabiduría y fuerza para el mayor desarrollo de la causa socialista de los dos países en la nueva era.
*Embajador de la República Popular China en Cuba
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