¿Qué pasó en la pelota?, pregúntaselo a Wells

Si tuviéramos la máquina del tiempo que imaginó, en su novela de ficción, el británico Herbert George Wells, nos hubiéramos subido a ella para que usted ahora leyera cómo le fue al equipo cubano en su intento de reinventarse frente a Australia, en su tercer partido en el Premier-12. Además, estuviéramos compartiendo una valoración sobre el movimiento, casi telúrico, que propuso el mentor Armando Johnson, en busca de la primera victoria en esa lid.

Creo que Wells, considerado uno de los padres de la ciencia ficción, no conocía mucho de beisbol; sin embargo, no le sería difícil evaluar la situación del equipo cubano antes de comenzar el juego de anoche. No le haría falta el invento que le permitiría viajar en el tiempo, para saber que el elenco de la Mayor de las Antillas o gana o se le acabaría cualquier oportunidad de clasificación.

Ese fue el motivo por el cual el alto mando que conduce Armando Johnson hizo las sustanciales modificaciones en la alineación. ¿Cómo le salió? Si Yadir Drake (RF), Yoelquis Guibert (CF) y Alfredo Despaigne (BD), con las responsabilidades de los turnos dos, tres y cuatro, se montan en la máquina del tiempo, y en vez de ir al futuro van al pasado, a fin de recoger sus rendimientos en el Clásico Mundial, en marzo de 2023, habríamos visto una versión ganadora.

Es cierto que la ausencia de Yoan Moncada, por su lesión, era un lastre de mucho peso, mas la decisión de ubicar a Jean Harvin Walters en su lugar, le aporta a la formación velocidad y posibilidades de poner la bola en juego; también propicia tener tres zurdos en línea: él de noveno, detrás de Yadil Mujica (2B), y delante de Roel Santos (LF).

Sin viajar en el tiempo, ya había visto a Rafael Viñales de titular, por primera vez, en el equipo grande de Cuba. Que pierde defensa detrás de home, sí, pero los que vieron el cambio como una locura, aunque no les falte razón, coincidirán con los otros que pensamos en que la plantilla cubana está urgida de batear. Entonces, bienvenido el leñador en el séptimo, creo que muy atrás en el orden de ataque. Lo anteceden, en la quinta y la sexta posiciones, Ariel Martínez (1B) y Erisbel Arruebarruena (SS), dos que llegaron al duelo frente a los australianos con una gran deuda en sus maderos.

Tal vez la mayor sorpresa haya sido la designación de un jovencito como Darío Sarduy para asumir el reto de vida o muerte en el torneo. En cambio, la aplaudo, porque el talento del muchacho hay que exponerlo en situaciones extremas.

En el momento que hacía estas valoraciones, a cuatro horas para el Australia-Cuba, un ferviente seguidor de la pelota me interrumpió en la redacción: «¿Ganaremos hoy?». Pregúntaselo a Wells, él es quien tiene la máquina del tiempo.