Cuba se despidió de la Copa Mundial de Fútsal, en Uzbekistán, sin sumar ningún punto. Como en los choques anteriores, el equipo acusó despistes defensivos que costaron muy caro, teniendo en cuenta que enfrentaban a un rival europeo con mucho oficio. El resultado final frente a Croacia fue de 7-0.
Pesó la experiencia de un conjunto con recorrido ante la juventud de los dirigidos por Osmel Valdivia, y pudo verse cómo la inexactitud del juego de los caribeños fue muy buen aprovechada por sus rivales. «Acusamos la inexperiencia de un equipo joven, pero me quedo con la actitud de los muchachos, a pesar de enfrentar siempre marcadores adversos», apuntó el director técnico cubano a Jit.
«Es un Mundial, aquí están los mejores, con un nivel muy superior al de nuestra área de la Concacaf. Enfrentamos equipos con mucho talento, lo cual les sirve a nuestros jugadores para tomar nota de cuánto deben mejorar, teniendo como referencia este evento», valoró.
«Debemos perfeccionar la defensa de la táctica fija, automatizar los movimientos defensivos y tener un poco más de paciencia en el ataque, para minimizar la cantidad de errores y pérdidas de pelotas que cuestan goles», sentenció.
Por su parte, el jugador Pablo Leonel Tamayo consideró que esta resultó una excelente oportunidad de aprendizaje, y destacó el mérito de jugar en este torneo, a pesar de no obtener los resultados deseados.
En ese sentido, concluyó Valdivia, «obviamente no nos vamos satisfechos con el desenlace, pero sí creo que debemos estar orgullosos de que pudimos clasificar entre las 24 naciones que llegaron a esta instancia, y jugar contra los mejores del mundo».

















COMENTAR
Responder comentario