La lucha despidió siete estrellas en París

Varios gladiadores de renombre y amplio palmarés anunciaron el final de sus carreras desde la alfombra olímpica de París. En total fueron siete los que decidieron poner fin a sus carreras deportivas, una vez concluida la cita bajo los cinco aros.

En la capital de Francia, el legendario grequista cubano Mijaín López, quien subió por quinta vez al escalón más alto del podio olímpico, dejó a todos sus rivales en el centro de la lona, y en ese mismo espacio dejó colocados sus botines, como símbolo de un adiós exitoso.

El ucraniano Jean Beleniuk, ganador de un conjunto completo de medallas de los Juegos, dos veces campeón mundial y tres veces europeo de lucha clásica, dijo que los Juegos de París fueron su última competición.

Asimismo, el campeón olímpico y dos veces medallista de los Juegos, tres veces del mundo y diez veces de Europa en lucha libre, el turco Taha Akgül, puso fin a su ilustre carrera tras ganar el bronce en la Ciudad Luz.

El medallista olímpico, mundial y europeo, el clásico azerbaiyano Sabah Shariati, también consideró que ya había hecho suficiente en este deporte. Su coterráneo, doble premiado en citas olímpicas, en el estilo libre, Haji Aliyev, también se despidió, a través de sus redes sociales.

La lista finaliza con el medallista de los campeonatos mundiales y asiáticos de lucha clásica, ganador de los Juegos Asiáticos por Uzbekistán, Rustam Asakalov, y el representante de Kirguistán, Ayal Lazarev, quien cuenta en su palmarés con premios de oro en los Juegos Asiáticos.