La temporada cambia de líder

Después de dos semanas, el Tigre fue expulsado de la cima por los Vegueros, que plantaron allí su vega, tras doblegar ayer, con su quinta victoria consecutiva, a los Cachorros de Holguín. Ese resultado se combinó con la paliza que los Cazadores les dieron a los felinos, dejándolos en el segundo escaño, tras su quinto fracaso en línea.

En el octavo episodio, dos boletos, un solo jit, que fue un doble, y un elevado de sacrificio, les dieron a los vueltabajeros las dos que hicieron la diferencia, en un desafío en el que Jorge Yoan Rojas (de 4-2, doble y jonrón incluidos, una anotada y tres empujadas) fue la clave en el marcador final. Para el puntero de los bateadores, William Saavedra, el desafío solo tuvo una entrada, la primera, cuando recibió un pelotazo, y ya no salió más al terreno.

Por los predios azules, Andy Vargas se convirtió en el cuarto pitcher de la temporada, con cuatro triunfos, y en uno de los tres que, con esa cantidad, no ha perdido. El derecho de los Leones se enfrentó a 22 oponentes, uno le llegó a circulación por boleto, otro por error de Yamil Rivalta, en segunda; y dos lograron pegarle jit en seis capítulos, en los cuales, además ponchó a dos, para firmar el mejor aval de un lanzador en la jornada. Fue también la quinta sonrisa consecutiva de los capitalinos.

Todo lo contrario ocurrió en Artemisa, donde se vuelve a repetir –no se sabe si por un maleficio, o es pura coincidencia–, que el lanzador más destacado de la semana pasada, para colmo de similitudes también avileño, es vapuleado en su primera salida tras la distinción.

Así como Ediel Ponce, en la etapa anterior, ayer Luis Marrero recibió un castigo letal. En solo dos y un tercio le pegaron nueve jits, dos de ellos cuadrangulares, regaló tres bases y le anotaron ocho veces. En tanto, su adversario, el zurdo Geonel Gutiérrez, en seis actos, dejó en esa misma cantidad de indiscutibles a los rayados, que completaron la cábala monticular ante él con seis ponches. El artemiseño José A. Jiménez sigue con sus flechas endiabladas, pues otra vez fue clave para su equipo: de 3-2, más doble y vuelacerca, dos anotadas y cuatro empujadas.

Camagüey salió de un empate a cinco en el séptimo, aprovechando el error del intermedista pinero Jeffery Pérez, que le abrió las puertas de home a Eglis Eugellés, quien estaba en circulación gracias a su único incogible en el encuentro. Por Matanzas, un buen relevo de cuatro y un tercio de Yoandri Daudinot, con cinco jits y un boleto, más el regreso de Over Cremet como jonronero, para llegar a siete, sustentaron el éxito del Guaso.

Una rebelión de las Avispas en el séptimo rollo, en la cual seis inatrapables, de ellos dos dobles; par de boletos y un error fue la pólvora que explotó en siete anotaciones, cuando los cienfuegueros aventajaban por 4-3 a los santiagueros.

En San José de las Lajas los Leñadores cazaron a los huracanes, sobre todo por el filo de las hachas de Héctor Luis Castillo (de 4-3, cinco anotadas, dos tubeyes y una remolcada) y Yudier Rondón (de 6-3, dos registradas, un doble y cuatro propulsadas). Keniel Ferraz, de relevo incólume, al aceptar solo un jit, sin permitir carreras y dos ponches, en cuatro completos, se encargó de apuntalar la victoria.

Los bayameses vieron cómo Alfredo Despaigne volvía al reinado de jonrones, con diez, la misma cantidad que tiene el pinareño Saavedra, pero los espirituanos lograron su décimo éxito, con el quinto salvado de Yankiel Mauris, líder en ese casillero.

Aun con nuevo líder de la campaña, empate en la cumbre jonronera, y dos equipos en cadenas de victorias que llegan a cinco, la 63 Serie Nacional sigue en deuda. Los 68 boletos de ayer, a más de ocho por juego, es un dato que deja mucho que desear.

ANOTACIÓN POR ENTRADAS 21 DE MARZO