Iván Silva dejó atrás su discreta actuación en el Grand Slam de Judo de París, y logró ubicarse en el quinto lugar en Bakú, en la división de 90 kg. Había salido de la zona de clasificación para los Juegos Olímpicos, por lo que necesitaba de la mayor cantidad de puntos posibles, a fin de no alejarse más. Ahora acumula 360 unidades.
Se vio exigido en su primer combate por Mamedaly Achyldyyev (TKM), al decidirse en tiempo de oro, tras recibir este último su tercera amonestación. Luego, se impuso por ippón a Martin Matijass (GER) y Vugar Talibov (AZE), respectivamente.
En semifinales, cayó por tres shidos en contra, frente al local Murad Fatiyev, quien finalmente se coronó campeón, y por bronce cedió ante el búlgaro Ivaylo Ivanov.
El húngaro Krisztian Toth quedó en plata, y el otro bronce fue para Talibov.
Idalys Ortiz (+78 kg) cerró la participación cubana en la capital de Azerbaiyán, estrenándose en la actual campaña. Ganó en 20 segundos a la anfitriona Nigar Suleymanova; pero en la segunda ronda enfrentó –por cuarta vez– a la serbia Milica Zabic, con quien perdió en tiempo extra, luego de que recibiera su tercera amonestación. Fue el segundo revés de su carrera frente a la europea.
Como en París, ganó la francesa Romane Dicko. La italiana Asya Tavano alcanzó la medalla de plata, mientras Marit Kamps (NED) y Elis Startseva (AIN) completaron el podio.

















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