Aun cuando las estadísticas del partido mostraron a Cuba superior a Alemania en la recepción, lo cierto es que, en pasajes claves del partido entre ambas escuadras, en el Preolímpico de voleibol, ese importantísimo aspecto del juego pesó un mundo en las aspiraciones caribeñas. El resultado, favorable a los europeos por 3-1 (19-25, 25-14, 25-22 y 25-15), fue fiel reflejo de lo que pasó en la cancha del Maracanazhino, de Río de Janeiro.
Desde que este grupo comenzó a jugar en lides internacionales, no se le había visto un nivel tan bajo como el de la segunda manga, en la cual muchas pelotas del servicio oponente hicieron un hueco en el recibo: o fueron a la pizarra como puntos, incomodaron al pasador o terminaron en terreno germano. En consecuencia, se flageló la estructura organizativa del sexteto, perdiendo su principal fortaleza (el ataque) y quedándose desprovisto en defensa ante el contragolpe. Por una parte, más fácil la defensa de campo rival que, a decir verdad, fue clave en la victoria germana, y por la otra le dio oportunidad a la ofensiva contraria.
Ese primer eslabón perdido ocasionó que la distribución hacia los atacadores comenzara a flagelarse, y aunque el bloque alemán tuvo los mismos puntos que el cubano (8), tocó la mayoría de los balones de la ofensiva antillana, para cristalizar sus contraataques. En esa arista, el veterano opuesto de 39 años, Georg Grozer, fue un látigo, tanto que llevó al resumen del partido 24 puntos, 22 de ellos en ataque.
Por su potencia y la velocidad sobre la net, la escuadra cubana parecía favorita. Bajo ese prisma transcurrió el primer set, cumplido Cómodamente, pero al perderse el recibo en el segundo y en el cuarto sets, se esfumó el voleibol, a tal punto que, con más errores, 31 por 25, los teutones vencieron con facilidad. Es cierto que el acomodador Lyván Taboada (entró por lesión de Manuel Thondike), no estuvo fino en las decisiones en el pase en el tercer periodo, y todavía menos en el cuarto, y que un hombre clave como Jesús Herrera se notó raro o torpe. Así y todo, fue el tercero (8) que más anotó de su equipo, superado por Miguel Ángel López y Marlon Yant, ambos con 13.
El resultado complica a Cuba, que basaba su opción clasificatoria a París-2024 en cuatro victorias, antes de medirse a Brasil e Italia (días 6 y 7). Con el triunfo sobre Ucrania el sábado, y este revés, hoy descansa y mañana se las verá con República Checa que, aunque ha caído dos veces –ante italianos y brasileños–, viene de un frenético 2-3 frente a los locales, a quienes vencían en el quinto por 14-10, y no pudieron concretar la sorpresa, lo que sí logró Egipto, con ese marcador, sobre Japón, en el grupo b, en Tokio. En esa llave, Estados Unidos y Eslovenia no han perdido un set en dos salidas, y Polonia y Canadá, con dos victorias dominan la C.

















COMENTAR
Responder comentario