
Para muchos entendidos, el resultado es lo más importante en el fútbol, por encima de mostrar una buena imagen sobre la cancha, tomando como estandartes el juego ofensivo y la posesión del balón. La selección nacional de Cuba adoptó este martes la primera variante para vencer, por 1-0, a Surinam.
Los Leones del Caribe se apoyaron en el gol de William Pozo (21’), uno de los pocos jugadores con la capacidad para inclinar la balanza en favor del once cubano. Por lo demás, ofensivamente, la escuadra de la Mayor de las Antillas evidenció poco fútbol, pero lo más importante es que aseguraron los tres puntos y llegaron a cuatro unidades en el grupo B de la Zona A, en la Liga de Naciones de la Concacaf.
En el aspecto defensivo, los cubanos se mostraron ordenados ante un oponente que careció de la suficiente potencia para inquietar a la zaga criolla. La zona medular contó con un trabajo eficiente de la dupla de recuperadores que formaron el guantanamero Yunior Pérez y el santiaguero Eduardo Hernández.
Las mayores opciones de Cuba estuvieron en los compases iniciales y finales del duelo. El resto del partido se caracterizó por ser poco dinámico, al punto que el aburrimiento se hizo presente en el estadio Antonio Maceo, en la ciudad de Santiago de Cuba.
Sigue preocupando la falta de gol en el once cubano, por lo que el colectivo técnico tendrá que trabajar en la búsqueda del futbolista ideal para jugar en la punta del esquema que proponga el entrenador espirituano Yunielys Castillo.
El próximo compromiso de los cubanos en este certamen será el 12 de octubre, frente a Honduras, en Santiago de Cuba.
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