Armand Duplantis y Shelly-Ann Fraser-Pryce son de esos atletas a los que siempre se debe tener en cuenta para seleccionar a los mejores. Él, de casi 23 años, se ha consagrado como el mejor pertiguista de la historia; ella, que cumplirá 36 en diciembre, se ha mantenido en la élite mundial desde 2007, cuando alcanzó medalla de plata con el relevo 4x100, en el Mundial de Osaka-2007.
El sueco conquistó este año los principales eventos en los que intervino: Campeonato Mundial de Oregón, Campeonato Mundial Indoor Belgrado, Campeonato Europeo y la Liga del Diamante.
Duplantis destrozó su marca personal en tres ocasiones, las dos primeras en la temporada invernal (6,19 metros y 6,20) y luego, en Eugene, con 6,21.
Vale destacar que la marca registrada en la cita del orbe fue la primera al aire libre que superó el 6,14 de la leyenda ucraniana Sergey Bubka.
Duplantis parece no tener límites. Según World Athletics (WA), posee más saltos sobre los seis metros que ningún otro pertiguista, y en 2022 ganó 18 de 19 lides, con 6,00 metros o más en 15 de ellas.
La jamaicana «alcanzó un altísimo nivel de consistencia, nunca antes visto en las y los velocistas», refiere WA. Sus resultados lo demuestran. En esta campaña bajó de los 10,70 segundos en los cien metros en siete oportunidades, meta alcanzada solo por cinco mujeres en toda la historia.
Cuatro de esas siete veces corresponden a la Liga del Diamante, galardón que conquistó por quinta ocasión. Con 10,67 se llevó su quinto título en certámenes del orbe, en Oregón, cita en la cual, además, alcanzó otras dos preseas, la plata en los 200 metros y en el relevo 4x100.
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