ÓRGANO OFICIAL DEL COMITÉ CENTRAL DEL PARTIDO COMUNISTA DE CUBA

¿Recuerdan ustedes la noche en que le dispararon por la espalda a David Ortiz, expelotero carismático, querido y respetado, próximo al Salón de la Fama de las Grandes Ligas, mientras compartía con un amigo en la capital de República Dominicana?

Foto: ALBAT

Fue el 19 de junio de 2019, en un centro de entretenimiento. Las investigaciones inmediatas de la policía aportaron que los disparos apuntaban a una supuesta confusión con la víctima, versión de los hechos que no convencieron ni a la población ni al propio Big Papi, por lo cual causó intranquilidad, al punto de que Ortiz instruyó que se hiciera una investigación privada, cuyos resultados se dieron a conocer por la justicia el pasado sábado 19 de marzo.

La investigación, encabezada por Ed Davis, excomisionado de policía de Boston, concluyó que el capo de la droga en República Dominicana, César Emilio Peralta, conocido como César, el abusador, ordenó el ataque porque el pelotero, supuestamente, «le había faltado el respeto».

The Boston Globe indica que Ortiz, al enterarse de la investigación, se sentía «triste, confundido y molesto». Señaló que, aunque él y la persona enviada a dispararle tenían apartamentos en un mismo edificio de la ciudad de Santo Domingo, su relación no era más que casual.

«Para ser honesto, cuando uno vive en un país donde la justicia está corrompida, uno quiere creer (en lo que el Gobierno alega), pero también uno está en desacuerdo», añadió. Aun así, David Ortiz indicó que esperará la decisión final de los tribunales dominicanos.

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