
Bajo el techo del estadio de la ciudad serbia de Belgrado, el triplista cubano Lázaro Martínez puso un nuevo «techo» a su carrera deportiva, al titularse campeón mundial en pista cubierta con una impresionante secuencia de saltos coronada por la mejor marca de su vida, incluidas las competencias al aire libre.
Un gran estirón de 17,64 metros en su primer despegue definió a Martínez como el hombre para sobrepasar, a la postre inalcanzable, con 18 centímetros de diferencia por encima del campeón olímpico de Tokio, el cubano nacionalizado portugués Pedro Pablo Pichardo, segundo, con 17,46 metros.
Señal de su excelente forma competitiva fueron también los tres vuelos siguientes al que lo tituló, todos sobre los 17 metros (17,04; 17,32 y 17,62), aunque renunciara al quinto y fuera más discreto en el sexto (15,76).
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Lázaro Ramírez Morán dijo:
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19 de marzo de 2022
00:26:22
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