Pinar del Río.–Alexander Urquiola está consciente del enorme peso que entraña llevar ese apellido a la espalda y dedicarse al béisbol.
Desde que se decidió por el deporte de las bolas y los strikes, siendo niño, lo ha estado experimentando. «Todo implica mucho trabajo, porque hay gente que no te reconoce. Piensan que las cosas que has obtenido se deben a que eres hijo del gran 
 atleta o del director exitoso, y como que te tiran a un lado», dice.
Sin embargo, el hombre que llevará las riendas del equipo de Pinar del Río en la próxima Serie Nacional, advierte que si ha llegado hasta aquí, ha sido luego de muchos años de esfuerzo.
Sabe que a su nombramiento lo han sucedido los más variados rumores. Por eso aclara que, si asumió esta responsabilidad, es para tomar sus propias decisiones, «y no como se dice por ahí, que será Alfonso (su padre) quien diga lo que se debe hacer».
Al nuevo mentor pinareño lo avala una hoja de servicio con más de 20 años de experiencia en la eide, la espa, la Liga de Desarrollo y la Serie Nacional.
La última vez que el equipo de Vueltabajo se coronó, Alexander formaba parte del cuerpo de dirección, y también vivió la experiencia inolvidable de ganar la Serie del Caribe.
Sobre la nueva responsabilidad, confiesa que ha sido una «grata sorpresa» y, al mismo tiempo, «un reto enorme», porque Pinar del Río es uno de los equipos más grandes del béisbol cubano, y porque tiene un público muy exigente.
Al frente de un concentrado de 40 atletas, por estos días evalúa junto a su cuerpo técnico la forma de sus muchachos, y trabaja para pulir las 
 deficiencias que el año pasado impidieron un mejor 
 desempeño.
«En otros tiempos teníamos bateadores que podían cambiar la decoración del juego en un instante. Actualmente no estamos en esa situación, salvo excepciones. Así que nos toca explotar otros aspectos dentro de la ofensiva, como la velocidad, el bateo y corrido, el amago de toque y el bateo».
-Se ha vuelto común que los equipos se refuercen con 
 atletas de otras provincias, o que retornan al país después de jugar en otras ligas, pero Pinar se mantiene con sus jugadores. ¿Habrá algún cambio con esto en la próxima temporada?
-Estamos abiertos a cualquier propuesta. En estos momentos, tenemos un muchacho de Matanzas, Esteban Terry, que está jugando la provincial con buenos resultados y pudiera integrar el equipo. No descartamos ninguna posibilidad, pero siempre manteniendo la idea de desarrollar a nuestros atletas.
-¿Qué distinguirá al Pinar del Río de Alexander Urquiola?
-Nuestra intención es sumar y darle continuidad al trabajo de otros buenos directores que nos han antecedido, respetando la filosofía y el estilo de los equipos pinareños, sin imitar a nadie.
-Recientemente han sido noticias el regreso de Vladimir Baños y el retiro de Yosvani Torres.
-Con Vladimir estuvimos conversando. Él es de acá y puede ayudar mucho al equipo, sobre todo a los más jóvenes. La salida de Yosvani, sin embargo, es una gran pérdida, no solo por lo que aporta como atleta, sino por el lado humano, pero entendemos que necesita un descanso para estar con la familia.
-En las últimas dos series, Pinar no ha pasado de la primera fase. ¿Será posible, con los peloteros que tienen actualmente, regresar a la élite de la pelota cubana?
-En realidad, nos hemos quedado a uno o dos juegos de la clasificación, la diferencia no es mucha. Pinar del Río posee los hombres necesarios para pasar a la segunda fase, incluyendo un grupo de atletas jóvenes con los que hemos transitado desde las categorías inferiores, a quienes solo les falta un poco de experiencia, y la confianza en que ellos pueden imponerse en el terreno.
-¿A su regreso de Panamá, donde cumple actualmente un contrato de trabajo, Alfonso se integrará al cuerpo de dirección de Pinar del Río?
-Él llegará un mes después del comienzo de la Serie. Estará cerca de nosotros, aportando su experiencia, aunque quizá no forme parte del equipo.
-¿Pensó alguna vez en ser el sucesor de Alfonso Urquiola?
-Nunca aspiré a dirigir, pero llegó este momento. Así que me toca asumir esta gran responsabilidad con disciplina y respeto. Como todo mánager, uno desea tener una buena temporada y clasificar, aportar nuevas ideas. El reto que afrontamos es grande, pero no hay nada imposible cuando se trabaja duro.


                        
                        
                        
                    














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Albornoz dijo:
1
4 de febrero de 2020
20:44:38
Veguero dijo:
2
4 de febrero de 2020
20:49:15
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