Futbolistas de casa descienden al grupo B

Sin tener muchas opciones de juego, Cuba perdió su cuarto partido de forma consecutiva en el Grupo a de la Liga de Naciones de la Concacaf y descendió a la zona B de este torneo para el año 2020, además de no clasificar de forma directa a la Copa Oro 2021.

El nuevo revés de la selección de la Mayor de las Antillas se produjo por goleada ante Estados Unidos 0-4, en el complejo deportivo Truman Bodden, en Islas Caimán, escenario donde el plantel cubano hizo las veces de local, ya que el estadio nacional Pedro Marrero, no reúne las condiciones (calidad del césped, luces y gradas) que exige la Concacaf.

Al parecer, se han vuelto una costumbre para el plantel cubano –cinco de siete partidos– las desatenciones en la marca de los rivales durante los primeros diez minutos, pues otra vez cae un gol tempranero (Josh Sargent 1´) que sentencia el desarrollo del partido. Con esa situación, el once antillano tiende a no generar fútbol del centro del campo hacia adelante, lo que propicia las condiciones ideales para una goleada de los adversarios, tal y como ocurrió en la noche de este martes.

Sabedores de las lagunas del conjunto cubano, los estadounidenses apenas pusieron presión en el encuentro y capitalizaron otras tres dianas por intermedio de Jordan Morris 26´ y 39´, y del propio Sargent 66´.

Estados Unidos y Canadá ganaron al plantel que comanda Pablo Elier Sánchez sin sobresaltos. Es cierto que ambos onces son cualitativamente superiores a la selección cubana, pero lo más llamativo es que no se aprecia un juego colectivo en los nuestros, a pesar de que varios jóvenes tienen talento para crecer, siempre y cuando logren insertarse en ligas internacionales.

El Grupo B, a donde irá Cuba en la temporada 2020, luce más acorde con la realidad de nuestro equipo. No se puede aspirar a triunfos cuando los futbolistas llegan con deficiencias técnicas y poco o ningún avance en su juego durante los últimos años. Cambiar la pobre imagen que dejó este deporte en 2019 tiene que ser un objetivo primordial, sin postergación.