Aunque tres partidos de la jornada inaugural tuvieron marcadores cerrados con tres o menos carreras de diferencia, y en Matanzas los bisoños Cocodrilos protagonizaron ante los villaclareños el mejor duelo (8-7, por los de casa en extrainning), lo cierto es que el primer inning de la sexta serie nacional Sub-23 se pareció más a un ponche que a un jonrón.
Comenzar la temporada con cuatro juegos suspendidos (recordemos que las subseries en este torneo son de cuatro duelos), por problemas de hospedaje, en este caso en la provincia de Santiago de Cuba, que debía recibir a Holguín, echa en saco roto el esfuerzo en coordinaciones en toda la geografía nacional en materia de logística y, sobre todo el de los peloteros, como los que pusieron sobre la grama del Victoria de Girón los jóvenes matanceros y villaclareños.
¿Quién aseguró, controló y chequeó para que esos jugadores que llevan meses entrenando no pudieran tener su estreno? La pelota, antes de pensar en contrataciones o medallas, tiene que arreglar su casa, si en ella no lo hace bien es imposible pensar en resultados internacionales a la altura de la exigencia de nuestra afición.
Contamos con fuerza técnica, con un grupo de trabajo de muchos conocimientos beisboleros, que, además, se han consagrado a la pelota, pero si falta organización y planificación, no hay jonrones, sino ponches. Salió mal el primer inning, pero hay suficiente calidad para ganar el juego.
También en la misma primera noche del certamen la página www.beisbolcubano.cu no podía mostrar los box scores y no se trataba de conectividad, pues a ella se llegaba desde los exploradores de la red. El mensaje de que estaba en construcción una vez finalizada la primera fecha, fue otro ponche para los aficionados y para los cientos de miles de personas en el mundo que les interesa la pelota cubana.
Afortunadamente ya está activa y con todos los juegos en línea, lo cual es fruto de un esfuerzo que las autoridades del béisbol han venido realizando por mejorar un sitio que pudiera ser, por lo que significa culturalmente el béisbol para nuestro país y para el mundo, uno de los más vistos o visitados de Cuba. A esa web hay que cuidarla como mismo el lanzador se cuida de no conceder bolas o lanzamientos fáciles que le pongan en peligro el juego. No existe manera de desarrollarse, ni en este ni en ningún tiempo, si no puede comunicarse lo que se hace.
Del arranque de la Sub-23 llamaron la atención la estampa del bateador zurdo capitalino Rafael Fonseca (4-3, incluyendo jonrón, ante la Isla de la Juventud) y las cinco empujadas del espirituano José Fonte, con cuadrangular y doble en cuatro turnos; otro que empaquetó varias impulsadas fue el avileño Jonathan Lázaro Bridón, con cuatro, ayudado también por un vuelacercas. Y desde la apertura, el control de los lanzadores sigue siendo el lastre de la calidad de los partidos: hubo 55 boletos, 17 de ellos en el desafío inicial de yumurinos y villaclareños.
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Y6 dijo:
1
22 de abril de 2019
08:40:01
El poeta yumurino dijo:
2
23 de abril de 2019
12:34:05
Reynier montero dijo:
3
24 de abril de 2019
09:45:10
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